Capítulo 47: Mucho en qué Pensar

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-Es un reino mucho más grande que el nuestro... ¡Son 3 continentes! ¿Te das cuenta de eso?
-Eso a mí no tiene porque importarme, pronto su familia se va a marchar de nuevo a sus tierras.
-Elena por favor, te sentarías en un trono má grande que el mío, seríamos las más poderosas, además te gusta ¿No?
-Elizabeth yo...
-Dijiste que quedaron en verse, anda que ha de estar esperando por ti.

La princesa salió para ir a buscar a mi inexperto león; todo el maldito día lo pasaron juntos y aunque probablemente sean mis celos de madre, no me agrada la manera en que ella lo observa.

-¿Y tus padres?
-Falleció mi madre y al poco tiempo mi padre dejando a mi hermana comprometida para dejar el reino en sus manos ¿Y tú?
-Probablemente has escuchado del paraíso que es el harén otomano.
-Nunca.
-Bien, mi madre es de aquí y llegó a ese harén, termino amando al sultán y el a ella.
-¿Entonces tiene más esposas?
-Legales no, pero si hay otras 2, la sultana Turhan y la sultana Esmeray.
-Eso quiere decir que tienes más hermanos.
-Otros 9- la cifra le pareció mucha- la mayor es Neylan que está casada y embarazada, Jalila que quizá está próxima a casarse, su mellizo Hakim que... Bueno está en problemas, yo, de mi está Zambak, unos gemelos muy traviesos.
-¿De verdad?¿Cuáles son sus nombres?
-Aslihan y Arpaslan, Aysel que vino con nosotros y luego mi padre tuvo un hijo con la otra sultana, el niño se llama Berat y finalmente está el hijo menor de mi madre, Yussuf.
-Son muchos.
-Bueno realmente no, comparado con otros.
-¿Y tú?¿Esposa?¿Harén?¿Hijos?
-Nada, mi madre insiste en qué no los tenga hasta que me vaya a provincia pero dice que es decisión de mi padre, entiendo sus motivos.
-¿Por?
-Motivos personales, ¿Y tú?- ella apenada negó mientras disfrutaba de un bocadillo.

-¿Por?-Motivos personales, ¿Y tú?- ella apenada negó mientras disfrutaba de un bocadillo

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-No pasa nada si se llevan bien, hará que la estancia sea menos incómoda Halime.
-No Hatice, no estoy de acuerdo, hay algo que me dice que no puedo dejar a mi león en sus manos.
-No debes ser tan protectora, algún día tendrá que ser y cuan...- se llevó las manos a la cabeza y se tambaleó.
-¿Estás bien?
-Solo es el cansancio y la preocupación de saber cómo están mis hijos.
-Ya verás que Zera- ella era su hija adoptada de 15 años- y los gemelos están bien.

*****

Allah Allah ¿Que voy a hacer con mi hijo? Cada que logramos mantener la paz encuentra la forma de romperla, obviamente no voy a acabar con su vida pero tampoco puede quedar sin ningún tipo de castigo.

Apenas le había concedido su deseo de irse a provincia y me sale una mujer de mi harén con que está embarazada, lo pero del caso es que el ya tiene sus propias mujeres pero no, debía fijarse en las mías.

Vino Berat que me sacó de mis tristes pensamientos, jugamos por unos momentos y conversamos sobre los tigres, es su animal favorito y casualmente había un cachorro en el palacio, quizá si los Aghas logran domesticarlo aún más se lo regalaré dentro de algunas semanas.

Amable:Una sultana escondida |COMPLETA/CORRECCIÓN|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora