Capítulo 49: Libres de plagas

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¡Hola! Por lo general nunca duro la semana completa sin actualizar pero está vez apenas pude hacerlo... ¡Espero que lo disfruten!

-Estas temblando- sentía su cuerpo estremecerse junto al mío- ven- la ayude a ponerse de pie, le acerque su bata azul que rápidamente se puso y de la mano la guié a la chimenea.
-De verdad que no sé que sería de mi si no te hubieras enojado esa noche- sonreí ante el recuerdo de mi primera noche con ella- ¿Recuerdas que me cargaste como si fuera un costal de arroz?
-Es algo que jamás podría olvidar- comencé a jugar con su cabello para que se relajara aún más- tampoco olvidare todas las veces que intente seducirte y fallé.
-Es un mal conquistador mi señor. Recuerdo la vez que me acorraló contra la pared y puso las manos junto a mis hombros para que no escapara.
-Y lo hiciste, te agachaste y pasaste bajo ellos.
-Te confiezo que esa vez estuve a punto de caer y dejarme llevar- notaba que estaba tan relajada que ya comenzaba a decir las cosas que no lo haría, era mi oportunidad.

-Te confiezo que esa vez estuve a punto de caer y dejarme llevar- notaba que estaba tan relajada que ya comenzaba a decir las cosas que no lo haría, era mi oportunidad

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La acomode de forma que su cabeza quedará en mi pecho y estuviera más cómoda.
-Pasado mañana me voy a la invasión, tengo pensado llevar conmigo a Zulfiqar ¿Qué opinas?
-Mmmmm... Esta bien, cuídalo mucho- dijo casi dormida

*****

-Sultana el sehzade Zulfiqar desea entrar.
-Dile que entre- no lo había visto desde hace 3 días, mañana se iría.
-Madre querida- pidió mi mano que le ofrecí para besarla y ponerla en su frente- ¿Cómo te encuentras? Mi hermano me dijo que estabas un poco mal.
-Mi malestar no se quita con medicinas y lo sabes hijo- de su boca no salieron palabras- mañana te irás con el sultán, debes ser fuerte y valiente. Es para lo que te has preparado toda tu vida.
-Lo sé y por eso he venido. En caso de que no vuelva no quiero que tú corazón llegué a sentirse afligido- me sorprendió lo que acababa de decirme. Tome su rostro entre mis manos.
-Escuchame bien mi león: tu sobrevivirás a esta y muchas otras guerras porque simplemente no podría vivir sin ti.
-Estoy algo asustado- dijo para arrojarse en mis brazos y buscar la protección que le daba cuando bebé.
-Ya hijo, tranquilo- entró Zambak sin avisar.
-¡Madre han llegado noticias!- mi hijo y yo nos despegamos- ¡Ha nacido el bebé de Neylan!
-Oh gracias a Allah ¿Cómo están ella y mi nieto?
-Están muy bien, es un varón muy sano al que llamaron Mustafa- se notaba que mi hija irradiaba alegría ante la noticia.
-La carta está fechada con 2 semanas y 5 días- de verdad que agradecía a Allah por esto.
-Ire por mis hermanos para contarles- después de un rato todos estaban aquí emocionados por la noticia.

Cómo ya era tarde pedimos la cena y se quedaron conmigo hasta que Aysel pidió que les cantará dhammow porque no lo hacía hace mucho, solo se la cantaba a Yussuf algunas pocas veces.

Amable:Una sultana escondida |COMPLETA/CORRECCIÓN|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora