Capítulo 39

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Me recargo en la puerta de la habitación y respiro profundamente antes de girar el pomo de la puerta.

—Andando B —muevo el cuello y suspiro.

Salgo de la habitación y como cada mañana tengo a varias personas agobiándome.

—Luna necesito que lea esto urgentemente —alguien coloca un folder en mi brazo—, son documentos que mando el consejo.

Continuo con mi camino al edificio líder —Luna necesitamos que apruebe los preparativos para el próximo festival... —me muestran una tabla porta hojas con una gran lista de pendientes.

Un guardia me llega por la espalda —Luna debe organizar los horarios de los entrenamientos ahora que las mujeres también serán incluidas.

La cabeza me quiere explotar pero volteo y con una sonrisa —Me ocupare, pasa por ellos al edificio líder en la tarde.

—Luna debe ir a probarse el atuendo que usara en el festival...

—¿Qué color prefiere azul piedra o azul pizarra? —me pregunta alguien.

Abro la puerta principal y tengo a todos sobre mí —¿Cómo? —le respondo sin entender la diferencia de colores.

Levanta dos muestras de tela y me punza la cabeza —El que tu consideres correcto —continuo andando y las preguntas me llueven, termino contestando con monosílabos Si, No, Tal vez.

Cuando llego al edificio líder suelto un suspiro y lo primero que me recibe es Elizabeth y Regina con una pila de documentos cada una, ¿De dónde sacan tantos documentos?

—Buenos días Luna —me saluda Elizabeth—, hoy hay mucho que hacer. Vendrá la Beta de la manada del sur a revisar unos documentos personalmente.

Pienso en la pila de deberes que debo hacer —¿A qué hora?

—A las 5:00 pm —veo el reloj en la pared falta mucho aun.

Asiento y mientras voy a la oficina de Derek ambas me cuentan los pendientes más relevantes y que debo hacer con urgencia. Dejan la pila de documentos y se retiran.

Cuando ponen un pie fuera de la oficina siento que me desbordo, esta rutina ya lleva una semana y estoy a nada de desplomarme. Los deberes de Alfa, Beta y Delta recayeron por completo sobre mis hombros sumándole los de Luna. B se acuesta en la cama que coloque aquí en la oficina y tan pronto echa se queda dormido, lo miro con envidia y tomo asiento.

Las horas transcurren y me desespera no terminar con los deberes, según me contaron cuando el festival de Luna está cerca los pendientes aumentan el doble. Tomo la taza de café que me trajo Elizabeth luchando contra el sueño que me consume pero cuando lo acerco a mis labios me quemo.

—¡Demonios! —me quejo y termino lanzando la maldita taza por la ventana, en un intento de calmar mi mal humor.

Se me empañan los ojos por la frustración y termino llorando sola en la oficina.

—Christal traigo el informe de la misión...—Rubí me toma por sorpresa y limpio mis lágrimas a cómo puedo— ¿Christal?

Cierra la puerta tras de ella, se acerca a mi sin decir nada y me envuelve en sus brazos. Eso me es suficiente para desplomarme.

—Estoy cansada —digo entre sollozos—, no sé si estoy haciendo las cosas bien o mal o si Derek va regresar ¿Y si algo le ocurrió?

—Lo hará —me asegura y una parte de mí ya no lo puede creer.

—Han pasado quince días Rubí —me separo de ella y limpio mis lágrimas—, las misiones no duran tanto —sorbo mi nariz—, a diario recibo preguntas sobre el ¿Luna cuando regresara el Alfa? ¿Luna hay noticias del Alfa? ¿Luna cómo va la misión del Alfa? y y-yo —se me corta la voz— quisiera responder pero no puedo. Su padre se fue y no hay un maldito día en que no lo maldiga por enviarlo a esa estúpida misión.

El teléfono suena y me toca recomponerme de inmediato, cuanto hasta tres antes de responder. Rubí me tiende un pañuelo y limpie mis lágrimas mientras respondo.

—Luna de la manada Secreto de Luna —del otro lado de la línea no escucho nada y eso me desespera— ¿Hola? ¿Hay alguien ahí?

Mi corazón se acelera de manera precipitada cuando escucho una respiración, ¿Acaso...?

—Luna —la boca se me seca por la sorpresa y me quedo en shock.

Las manos me tiemblan y en un susurro digo:

—¿Derek? —escucho como sueltan un suspiro de alivio, pasan un par de segundos y todo se queda en silencio hasta que escucho el sonido de que la llamada ha sido terminada por la otra línea.

—No, no, no —repito e intento devolver la llamada pero no puedo.

—¿Qué paso? ¿Quién era? —me pregunta Rubí pero no puedo articular palabra e insisto en marcar de nuevo aunque es inútil. Rubi me toma de la mano— ¡Basta! —me sobresalto— vas a entrar en una crisis nerviosa o algo Christal.

Me obliga a tomar asiento y me hace tomar bocanadas de aire, llama a Elizabeth para que traiga agua.

—¿En verdad era él? —me cuestiona cuando me ve más tranquila.

—Si —digo con una seguridad que hasta me sorprendo por mis palabras—, reconozco su voz, pero me colgó de inmediato. Algo no anda bien —siento una opresión en el pecho, tengo un mal presentimiento—, creo que...

El sonido del teléfono me interrumpe y lo tomo de manera veloz

—¿Derek? —digo con una enorme esperanza.

Escucho una algarabía de fondo

Apártense de aquí, continúen en lo suyo

Déjenlos respirar

—Luna —me habla una voz femenina

—¿Cora? —digo confusa y escucho como respira entrecortada como si hubiera corrido un maratón.

—Necesito que vengas a la manada del sur YA —me grita y veo a Rubí porque hasta ella pudo escuchar lo último.

—De que hablas se supone que vendrías a las 5:00 por...

—No iré —me interrumpe—, hay una situación en la manada que...

Me exaspero —No puedo dejar la manada Cora, ahora mismo soy la líder y...

—¡Déjame acabar con un carajo! —escucho como da órdenes a diestra y siniestra.

—¡Habla con un demonio! —le grito frustrada y aprieto tanto el teléfono en mi mano que escucho un crujido.

Las palabras que me dice me dejan helada que hasta término de pie y probablemente con la presión hasta el suelo.

—Derek está aquí en la manada —suelta—, junto a los otros dos. Enzo esta grave y un tal Isaac también pero Derek no reacciona o tampoco el de cabello blanco. Necesito que vengas ahora mismo porque puede que...

No dejo que termine la oración

—Iré enseguida —azoto el teléfono en el escritorio y salgo de la oficina.  

Ella es mía (En edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora