Capítulo 15

74 3 627
                                    

Kasumi

El resto de la noche pasa con tranquilidad. Para cuando regreso parece que aún no ha llegado nadie más de los que salieron, así que termino pasando un rato con Asuka, que acabó con su sesión de entrenamiento al poco tiempo de que yo regresara. Al no conocerla mucho sigo sin estar del todo cómoda a su alrededor, pero de igual forma su compañía resulta agradable. En cuanto a los demás, fueron llegando a distintas horas y sus interacciones no pasaron de un saludo y poco más.

En algún punto de la tarde Aizel nos reunió a todos para explicar lo que debemos hacer; en resumen, el asunto es que parece haber una organización de humanos que ha estado capturado vampiros a pesar de no tener relación con los cazadores, poco más que eso se sabe al respecto y ahora nosotros tenemos tres días para encargarnos de eso... de alguna forma no muy explícita que siento que no me gustará.

—Makoto —Aizel se dirige al vampiro junto a Lucy—, ¿te importaría orientar a la nueva esta noche? Que vaya conociendo el trabajo.

—Seguro —asiente con una sonrisa antes de dar un paso al frente—. ¿Cuál es nuestra parte?

—Ustedes deben conseguir esto —indica, entregándole a Makoto una foto que no alcanzo a distinguir desde donde estoy—. Será transportado entre las siete y ocho, lo más sencillo para ustedes es que intenten aprovechar ese tiempo.

—De acuerdo —Makoto vuelve a asentir como antes.

A continuación, se reparten las tareas de los demás integrantes del grupo a las cuales en realidad no les presto mucha atención, ahora solo me angustia cómo irá nuestra parte. Finalizado esto, cada quien pasa a prepararse para lo que debe hacer. Al no tener la menor idea de lo que debo hacer, me limito a seguir a Makoto.

—¿Exactamente qué vamos a hacer? —pregunto en un tono más inestable de lo que esperaba.

—Lo mismo me pregunto, ¿tienes alguna idea? —devuelve con aire distraído mientras revisa un papel. ¿Esto es en serio? ¿No se supone que él debería ser el guía? Para comenzar, ni siquiera entiendo por qué Aizel me agrupó con el que parece ser en el que menos confía del grupo.

Intento disimular un poco, tomando la foto que no había podido ver hasta ahora y poniendo cara pensativa. Ni siquiera sé lo que estoy mirando, parece una caja, pero saber esto no me ayuda en nada.

—Lo siento, no tengo nada —admito luego de unos incómodos y silenciosos minutos—. ¿Cómo hacen este tipo de cosas normalmente?

—La verdad es que estas cosas no son muy comunes entre lo que nos asignan, aunque cuando pasa es casi siempre Kou el encargado de estas partes —responde sin mucho ánimo, volviendo a verme a los ojos. Luego de una pausa, continúa—. Podríamos tratar de infiltrarnos para conseguirlo, ¿qué tal se te da la actuación?

—No muy bien —niego con una sonrisa nerviosa, no puedo arriesgarme a entrar en pánico en una situación así, solo nos pondría en riesgo a ambos.

—Es su primer día, deja de complicarle las cosas a la pobre chica —interviene Asuka, que no sé en qué momento llegó con nosotros—. Aizel ya lo dijo, solo deben intervenir durante el transporte.

—Bien —asiente, pero se cruza de brazos y luce algo irritado—. Hagamos esto de la forma más obvia y aburrida posible, después no te quejes si opino sobre asuntos que no me incumben.

—Tranquila, puedes ignorarlo cuando se pone así —la vampira se dirige a mí, poniendo una mano sobre mi hombro en señal de comprensión, mientras el vampiro protesta que no debería decir esas cosas con él al frente—. Tampoco hay que culparlo, solo quiere lucirse, no tenemos miembros nuevos muy seguido —hace una breve pausa—. Suerte, sé que les irá bien —añade antes de retirarse sin prestar atención a las protestas de Makoto.

V talesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora