Capítulo 13

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Al igual que todos los días, la alarma suena para todos al mismo tiempo, sin embargo, esta vez es seguida por un anuncio en el que ordenan que todos los que llegaron tres meses atrás se reúnan. Mientras Kasumi se dirige al lugar indicado, puede notar la tensión en el ambiente y no le hace falta preguntar para saber a qué se debe; todos ya pueden hacerse una idea de lo que viene.

Lo primero que hace Kasumi al llegar es buscar a Sora con la mirada, lo cual consigue sin mucho esfuerzo; le gustaría ir con él, pero justo en ese momento, todo comienza.

Los presentes fueron divididos en cuatro grupos de diez personas; en cuanto a Kasumi, resultó en uno en el que no conocía muy bien a nadie, así que se limitó a quedarse en el fondo siguiéndolos de cerca, tratando de mantenerse lo más tranquila que pueda.

El hecho de que aún no dijeran en que consiste la prueba, adicional a que ni siquiera hay alguien guiándolos además de las flechas colocadas en el suelo, solo consigue inquietar más a todos los presentes.

Un vampiro particularmente alterado pasa la mitad del recorrido preguntándole cosas a la chica a su lado, la cual decidió callarlo al perder la paciencia; a partir de este momento todos permanecen en silencio hasta llegar a una amplia puerta abierta al final de un pasillo.

De la oscura habitación a la que da la puerta, ninguno alcanza a distinguir nada. Todos se miran entre sí, como preguntándose quién se atreverá a entrar primero y así duran por lo que les parece una eternidad, hasta que el que había estado al frente hasta el momento se decide a dar el primer paso, seguido de todos los demás un par de segundos después.

Cuando Kasumi, que seguía siendo la última ya se encuentra en el interior, la puerta se cierra de golpe a su espalda, sobresaltando a los presentes, mientras que las luces en el sitio se encienden, dejándolos algo aturdidos en lo que se acostumbran a la nueva iluminación.

En cuanto pueden distinguir el lugar, se encuentran con un pequeño cuarto con una ventana que abarca casi por completo uno de los muros y una puerta a su derecha, mientras que en el interior no hay más que una barra con diez botellas con un líquido de color azul neón en su interior.

A través de la ventana se puede observar un enorme espacio, en cuyo centro se encuentra un vampiro al cual Kasumi no tarda en reconocer como Aizel, que tiene cara de ser el que menos quiere estar allí.

—No puedo creer que tenga que hacer esto —protesta Aizel para sí mismo en voz baja. Luego de soltar un suspiro para intentar mantenerse en calma, se dirige hacia el grupo que será evaluado—. La prueba es simple, todo lo que deben hacer es venir aquí uno por uno y luchar conmigo; la idea es que aguanten al menos cinco minutos, quien no lo consiga... bueno, ya veremos qué pasará —hace una pausa corta—. Ahora mismo debe haber exactamente diez botellas en donde están, cada uno de ustedes debe elegir una y beber su contenido —indica y espera a que obedezcan, una vez que lo han hecho, continúa—: Lo que acaban de beber impedirá que se regeneren mientras tenga efecto; para hacerlo más interesante, yo también lo bebí, así tal vez sea algo más fácil para ustedes y lo haga un poco menos aburrido para mí, claro, si alguno logra hacerme algún daño. Ahora, en la parte de debajo de cada botella debe haber un número, éste decidirá su turno para pasar, comenzando con el número uno; así que, número uno, estoy esperando.

Al escuchar esas palabras, nadie esperó un solo instante para revisar el número que les corresponde. Kasumi sintió un escalofrío recorrerle la espalda al ver el número uno, pero se tranquilizó considerablemente al notar un cero, sería la última, así que tiene tiempo para mentalizarse sobre lo que tendrá que hacer.

El primero ha resultado ser el que más inquieto lucía en el camino y que ahora parece haber visto un fantasma. No hace falta poner mucha atención para notar que se encuentra completamente aterrorizado, temblando tanto que apenas consigue mantenerse en pie; luego de algunos instantes consigue reunir el valor suficiente para salir de allí.

V talesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora