65 ❙ Declaración de Guerra

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Un sueño que pronto se despertará incluso si extiendo la mano

Un sueño que pronto se despertará incluso si extiendo la mano

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-¿Irás al festival con el titán mandíbula?-cuestiona Eren.

Alzo los hombros con indiferencia mientras muerdo mi pan.

-¿No debería ir por alguna razón?

Eren me mira un momento antes de negar.

Sé que está mintiendo.

No sé qué traman Eren y Zeke, pero hace días que los veo hablar y pasarse comunicados. También he visto a Eren hablar con Falco, pero me ha dicho que el niño es ignorante de todo lo que sucede realmente, me ha prometido no involucrarlo pero es Eren, y como su hermana sé que hace tiempo se ha vuelto en un mentiroso de primera.

No puedo ser tan descuidada ahora que los guerreros han vuelto, sobre todo por Reiner, que no me quita el ojo de encima esperando el momento en que haga algo sospechoso.

No hablamos de la isla. Le pedí a Reiner mantener ese tema apartado ahora que intentaba volver a mi vida aquí, no se lo creyó demasiado, pero tampoco le conviene indagar sabiendo que Zeke me está cubriendo. Sería un verdadero problema.

-Eren, ¿dices que debo preocuparme por algo?-digo levantándome de la banca.

-No.

-¿Nada sucederá a mis espaldas? ¿Aun puedo confíar en tí, Eren?-insisto.

Él suspira poniéndose de pie.

-Sí, As, sigo siendo tu hermano, nada ocurrirá, te lo prometo. Y te prometo que pronto podrás regresar, tu trabajo ya está casi completo.

Nunca había ido a un festival, y no porque no quisiera, pero en casa no había eventos como estos, y si los hubiera seguro no serían ni la mitad de extravagantes que los de aquí

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Nunca había ido a un festival, y no porque no quisiera, pero en casa no había eventos como estos, y si los hubiera seguro no serían ni la mitad de extravagantes que los de aquí.

Sí, puedo decir que perdí el control y tras quedarme sin un centavo encima, use la billetera de Porco para seguir probando dulces. Prefería lo salado, pero sabía que no tendría otra oportunidad como esta. Fueron horas paseando de puesto en puesto probando comida, y disfrutando de los pequeños entretenimientos que había.

Black Tea │Levi AckermanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora