Pero los sueños llegan despacio y se van tan rápido
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-Vaya-digo después de acabar mi pan-. Quien diría que después de volver de la muerte, o algo así, estaría compartiendo la cena con mi esposo hecho mierda-miro a Levi, después de verme quedo inconsciente-, mis compañeros y amigos de la Legión, mi hermana-Hange sonríe mientras los chicos parecen estar viendo un muerto-, la mocosa que me dio información de mi hermano pero no me dijo que era un loco sin cura-Annie alza los hombros con desinterés-, mi viejo amigo el general Magath que intento mandarme al muere, dos mocosos que perseguí por toda la isla y estaban viviendo en mi casa, el acorazado que tiene más vidas que yo, mi adorada Pieck, y...-miro a Yelena y a Onyankopon-. Bueno honestamente, no sé qué son ustedes.
-En vez de enumerarnos, podrías hablar de lo que sabes-sugiere Hange.
-Es interesante-interviene Magath cuando estoy por hablar, alzo las manos incrédulas, ¿hablo o no?-¿Que los hizo cambiar de parecer? Saben que conseguirán el mundo que quieren si dejan tranquilo a Eren Jaeger, sería el cielo para ustedes, demonios de la isla. Estuvimos tan cerca de mantener a Eren y a Zeke fuera de contacto...Si no los hubieran ayudado.
-¿Me dejan hablar?-pregunto, nadie emite sonido-Bueno, muchas gracias. Les contare una linda historia. Hace dos días, o eso creo, como deben saber Floch, quien está muerto para quien no lo sepa, nos llevó a Hange y a mi hacia Zeke y Levi. La historia de ellos la saben, pero aquí va lo que paso cuando los deje huir. Le dispare a Zeke, lo iba a matar-admito-, pero Floch amenazaba con dispararme y tuve que matarlo, iba a ser un problema a futuro si seguía vivo-todos asienten de acuerdo, o bueno, quienes lo conocieron-. Tenía el camino libre para matar a Zeke, pero me atacaron por la espalda, y aunque le dispare a esa persona, el daño estaba hecho-toco mi abdomen, donde la bala habia impactado-. Pero algo paso, y en lugar de morir aparecí en la coordenada, no tengo el motivo exacto, pero allí me encontré con Zeke y Eren...y con la fundadora Ymir.
-¿Ymir Fritz?-cuestiona Magath.
-Mhm-asiento-, Ymir obedecía a todo lo que Zeke le decía, materializaba lo que fuera, y descubrí que lo mismo pasaba conmigo, pero no se lo dije a Zeke. El tiempo allí es mucho más veloz, pasan años en unos cuantos minutos, y cuando llego Eren, fue un desastre, peleas y más peleas-resumo-. Eren confeso estar en contra de Zeke, lo estaba traicionando. Volví a intentar matar a Zeke y nuevamente estuve a punto, pero el también me hirió, y esta vez nuestra pelea activo el que viajáramos a los recuerdos de nuestro padre. Fue difícil, y aun no comprendo todo lo que vimos y vivimos en ese tiempo, pero al regresar sabía que tenía que detenerlos a ambos. Corrimos tras la fundadora que ya se había puesto en movimiento para cumplir la orden de Zeke, el plan de eutanasia. Pero cuando la alcance...Viví su vida, vi sus recuerdos, sentí lo que sintió, y entendí lo que necesitaba para lograr mi objetivo.
Suspiro, esta parte estaba borrosa en mis recuerdos.
-Todos eran gritos de los tres intentando que nos obedezca, intentando ganarnos su favor, pero finalmente Eren ganó, como lo verán-señalo nuestro alrededor-, pero eso no fue todo. La fundadora me concedió algo, me dio una segunda oportunidad de volver a la vida sin el daño que Zeke y ese soldado me causaron, a cambio yo debo detener a mis hermanos, me escondí por la capital hasta que encontré a Sasha... Necesito que este grupo tan raro que han formado, funcione, no porque se harán amigos, tenemos el mismo objetivo: no queremos que ni Zeke ni Eren triunfen hoy. Todos luchamos por algo y ya está.
