Cap. 17 "El enfrentamiento con los Weasley's"

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Nota: se los dije! Estamos de festejo. Segundo capítulo de día. Dudas, comentarios, adelante... aquí andamos

CAPITULO 17
"El enfrentamiento con los Weasley's"

La tensión en la oficina había subido al tope por primera vez en cuatro años. Gabrielle le había ignorado los últimos dos días justo después que los dos se gritaran de cosas cuando ella descubrió que Harry había extraviado uno de los expedientes más importantes, y más tarde lo hubiese encontrado manchado de chocolate y morusas de galleta.

La verdad, era que Harry se encontraba todavía dolido por la declaración de Gabrielle, tanto que  había fingido en un par de ocasiones que  hablaba con Ginny por teléfono,  hasta que este sonó cuando el llevaba una de sus fantasiosas charlas, después de eso Harry perdió credibilidad y dejó de celarla.

Pero en el fondo, Harry había mandado al menos tres lechuzas a Ginny, sin que ella le respondiera alguna. sus ansias habían hecho llamar a Madame Alice, quien le platicó la historia de cada uno de sus perros, olvidando por completo la pregunta inicial "como estaba Ginny". Estuvo seriamente pensando en enviarle un móvil, prendido y marcarle para hacerlo sonar y que ella respondiera. Pero creía que eso sería demasiado invasivo.

Después de una semana sin saber de ella, pretendió preguntarle a Dennis si ella se había presentado en el campo de las Arpías, sin embargo el joven respondió que su esposa tenía prohibido dar noticia respecto a las jugadoras activas y no activas.

El silencio se había hecho muy evidente después de mediodía cuando Harry había vuelto con un maleficio en la cara que le había generado un montón de verrugas que le había aventado un mago borracho que se negaba a pagar con libras en un pub en el centro de Londres. Harry traía una gruesa capa de ungüento color rosa chillante que garantizaría que en pocas horas las verrugas se desprenderían de su piel.

— Aquí estás —    saludó el señor Weasley, cuando Harry salía de la enfermería — te he estado buscando. Gabrielle me dijo que probablemente estuvieras aquí.

Harry pensó en la rubia. Ella por primera vez no se había ofrecido a curarle la herida y él no estaba dispuesto a rogarle.

— Recibí un hechizo directo a la cara — apuntó Harry a su rostro —
— Eso se ve asqueroso, Harry —Arthur Weasley paladeó por el asco —
— Maggie dijo que el proceso tardará alrededor de dos horas en desprenderse. ¿en qué puedo ayudarlo, Señor Weasley?
— Oh, si — dijo el Señor Weasley tratando de evitar poner cara de asco — Molly me ha pedido que te invite el día de hoy a comer. Será solo dos horas y volveremos al Ministerio para terminar el horario laboral.

Harry sintió como una de las verrugas se desprendía de su rostro cayendo al suelo y reventándose. Arthur Weasley se hacía a un lado para evitar mancharse.

— Creo que no es un momento oportuno de compartir la mesa con alguien
— No te preocupes, estoy seguro que Molly encontrará una cura para...—   Arthur le hizo señales a Harry  en su mejilla. Harry sintió como si una gruesa capa de piel cayera manchando de rosa su saco  — estoy seguro que en dos horas, esto ya habrá pasado.
— ¿Usted cree? —  otra verruga caía al suelo, Harry logró moverse para que esta no cayera encima del zapato de Arthur Weasley —.
— Claro que si. Te veo en la salida. Nos iremos por polvos flu.

Y Arthur Weasley se marchó dejando a Harry un poco confundido.

Harry tuvo suerte que para las dos de la tarde gran parte de las verrugas se hubiesen desprendido, había quedado una ligera capa rosada con tono verdoso en su mejilla, donde aun se aferraban pequeñas verrugas que no parecían ni verse tan asquerosas, pero que tampoco parecían querer ceder.  Apareció  a mitad del pasillo y caminó a un lado de  Arthur Weasley hasta donde estaban en las chimeneas.

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