Capitulo 41

373 23 25
                                    

Notas: y tengo todos los capítulos de esta semana, solo hay que justificarlos. Se vienen tiempos difíciles y tengo que confesar que estos capítulos vienen cortos por los hechos que suceden. Sin más que decir aquí los dejo:

CAPITULO 41
"Una decisión impulsiva"

El calor dentro del Ministerio era insoportable. Bastaba con salir al pasillo que conectaba al resto de las oficinas de auorres, para recibir  el fuerte olor a sudor que inundaba el piso completo.

Harry transpiraba como si estuviese afuera, haciendo ejercicio. Había aventado su saco lo más lejos posible y se había remangado su camisa mientras repasaba el plan de estrategias para la misión a Siberia. Gabrielle quien estaba del otro lado de la oficina, se había levantado el cabello en una coleta mientras los olores  de su  perfume llegaban a Harry quien había decidido ignorar por completo el llamado y buscaba enfocarse en el proyecto.

⎯ No puedo más, tengo que salir de aquí.

Gabrielle dejó caer una resma de hoja a su escritorio abanicándose con la mano su rostro.

— iré por un café en las rocas, fuera del Ministerio ¿ quieres uno?

Harry suspiró, volteó a ver la foto de la bebé aferrada aun sobre su pared, extrañaba acariciarle. Se giró a ver a Ellie y tomó su cartera.

⎯ Iré contigo, yo también necesito aire —  Harry se levantó de su asiento. Gabrielle no pudo evitar sonreír cuando este se atoró con la silla y trastabillo un poco.

La plaza central del Ministerio estaba abarrotada y se sentía tan sofocada que al fondo, una bruja se había desmayado por el calor. Harry trató de ignorar todo el bullicio que había. Al menos en poco tiempo, estaría pidiendo su café frio en la cafetería que se encontraba a media cuadra del Ministerio.

Harry y Gabrielle se habían acercado a la salida del Ministerio cuando al fondo, reconoció una cabellera pelirroja a una gran distancia. Era Ginny. El corazón le dio un vuelco, no sabía si se debía al calor tan sofocante o porque los nervios lo estaban traicionando que sintió unas ganas enormes de salir tras ella.

La pelirroja simplemente lo miró sorprendida y giró sobre sus dos pies dándose la vuelta hacia otra dirección, huyendo de él.

Apenas se giró para ver a Gabrielle y ella lo entendió todo. Se separó de Harry y tomó otro camino. Si había algo que tanto le gustaba de ella, era que ambos podían entenderse demasiado bien.

Vio a Ginny tratar de salir del Ministerio, Harry tuvo que casi correr para tomarla del brazo y detenerla.

⎯ Lo siento, en verdad lo siento  — le dijo Ginny —

Ella traía sus mejillas coloradas por el calor. Una blusa de rayas con manga tres cuartos y su cabello amarrado en una coleta. Algunos cabellos de su frente estaban despeinados por el agobio del clima.

⎯ No deberías de estar aquí, ya lo hemos hablado antes.
⎯ Lo sé, pero necesitaba venir...

Harry giró para ver a su alrededor. La gente se movía de un lado a otro. Harry buscaba con la mirada a Gabrielle que ya había desaparecido, pero también buscaba a otra persona más: Draco Malfoy. Por un momento pensó en que ella pudiese haber ido a buscarlo, para llegar a una tregua con él. El solo pensarlo, le voló la cabeza y tal vez fue tan notorio, porque Ginny pareció  leerle el rostro.

⎯ He venido a ver a papá — exclamó ella molesta —
⎯ Debiste de habérmelo dicho a mí, que querías hablar con él... — Harry todavía tenía el brazo de Ginny sujeto a ella. Ginny jaló con fuerza molesta para zafarse de él. Miró ese brillo de coraje en sus ojos. Por unos segundos, lo encontró encantador, quería llevársela de ahí y convencerla a besos de que no se fuera —
⎯ ¿para qué decirtelo? No es mi culpa que no tengas en tu departamento una chimenea, o una lechuza o algún otro medio para hablar con mi familia...

Nueva OportunidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora