Capitulo 30 "Volviendo a casa"

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Notas de Issa: Este es el último capítulo que tengo editado, ya que los otros que vienen son más densos y requieren más tiempo de edición, por lo que no se si alcance para publicar algo mañana. Aun así, gracias por estar aquí, leyendo

Si te esta gustando lo que escribo, deja tu voto, eso me ayuda a saber que  te gusta la historia.

Capítulo 30

Volviendo a casa

Al día siguiente, Harry lo despertó el olor a azares, mientras se retorcía en una cama bastante tibia. Debajo de sus narices estaba la larga y roja cabellera de Ginny haciéndole cosquillas. Ella dormía plácidamente a su lado, mientras tenía el brazo de ella sobre su pecho, bastante relajado.

Por su mente pasó que podía tener mañanas muy semejantes a esas, disfrutar de ella cada mañana. Tal y como lo estaba viendo en ese momento. Después de la ducha, Ginny entregándole una taza de café y viéndola vestir. Aquel suéter suyo de color verde y verla cepillar su cabello mientras tarareaba una canción. Algún comentario tonto de parte de él que la hizo reír y salir descansados de la habitación.

Mientras Ginny dejaba la habitación, Harry bajó hasta la barra, sin que ella se diera cuenta.

⎯ ¿tendrá una pluma y pergamino? — preguntó Harry al barista. Cuidándose las espaldas, garabateó algunas líneas y secó rápidamente el pergamino para doblarlo y ponerle remitente —

Cuando vio a Ginny acercarse, lo escondió dentro de su abrigo y se dispusieron a salir.

De regreso en el auto, tomando carretera muggle, Ginny parecía bastante desconectada. Harry sabía perfectamente por lo que ella estaba pasando. El tema era Teddy, el mismo tenía esa sensación bastante similar a ella y unos celos le golpeaban en el pecho el recordar que Teddy podía creerle más a Draco.

Pero en aquel momento si había alguien por quien Harry lo daría todo, esa persona era sin dudar, Ginny.

⎯ ¿cómo vas?— Harry la vio por el rabillo del ojo, mientas que aun manejaba —
⎯ Meh — expresó Ginny. Ella parecía enfocada en el verde y grisáceo paisaje camino a Glasgow —
⎯ Llegaremos a Londres en 6 horas — pero Ginny no reaccionó — Antes de salir me dieron una nota para ti.

Ginny se giró hacia Harry un poco sorprendida.

⎯ ¿para mí?
⎯ Para ti — Harry sonrió — esta dentro del bolsillo de mi abrigo — señaló Harry —
⎯ ¿ no será esa estúpida broma muggle? De esas que asustan al meter la mano — soltó Ginny con enfado — porque no esto y de humor para eso.
⎯ ¿Por qué querría hacerte algo así? — preguntó Harry sin sentido —
⎯ Yo lo haría — confesó Ginny — si te viera aburrido deprimido.
⎯ ¿ puedes sacar la nota, por favor? — soltó Harry . Ginny no muy convencida ingresó sus dedos. Un amarillento pergamino pasó a las manos de Ginny—

Harry inmediatamente notó la expresión de Ginny, los ojos le brillaron con una intensidad que pocas veces sucedía. Una sonrisa se dibujó tan grande que parecía volver a ver la Ginny bastante entusiasta y sonrió aún más cuando leyó la nota.

⎯ ¿Quién te la ha dejado? — le preguntó Harry —
⎯ Es de Teddy — Ginny parecía volverla a sonreír — está pidiendo disculpas por lo que hizo ayer
⎯ Creo que recapacitó — Harry, quien iba en el volante, sonrió para sí mismo por el entusiasmo de Ginny —
⎯ Más que eso, retrocedió— Ginny le mostró la carta— mira lo mal que han escrito. Tendré que hablar con él sobre esas faltas de ortografía.

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