Capítulo 62 "El Regalo de Ginny"

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Yeii!!! Mañana es día festivo en México!
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Nos seguimos leyendo mañana

CAPITULO
El regalo de Ginny


Harry
⎯ Una noche en el The Majestic, eso es lo que quiero como regalo de cumpleaños — le dijo a Harry mientas se metía una cucharada de avena en su boca.
⎯ No hablarás en serio.
⎯ ¿Por qué no? ¿Temes que los empleados de ahí me confundan con Gabrielle?

Eso había sido un golpe duro para Harry. Le tiró una mirada fulminante que lo único que logró fue que Ginny soltara tremenda carcajada.

⎯ ¿Ellos saben que soy tu esposa? Quiero imaginar las caras de las mucamas cuando me vean de tu brazo "Buenas noches, Sra. Potter" — soltó con satisfacción la pelirroja —
⎯ Tenemos una habitación aquí en casa ¿Por qué demonios quieres ir al The Majestic?

Ginny le tiró una sonrisa bastante picara y le guiñó un ojo.

⎯ Aquí no puedo gritar a mi antojo — Ginny se llevó otra cucharada más de avena. Harry torció los ojos y se concentró en seguir escribiendo su informe — también porque Teddy vendrá el día de hoy ¿imagina que nos descubra teniendo sexo?

Harry suspiró, Gastón quien estaba debajo de sus pies, levantó su cabeza en búsqueda de un pedazo comida. Harry le aventó toda una salchicha completa.

⎯ ¡EY! — reclamó Ginny — ¡te vi lo que hiciste! Deja de darle comida a Gastón.
⎯ Lo siento, viejo — le habló Harry al pastor alemán — ya nos descubrieron.

Harry vio a Ginny levantarse de la mesa para dejar el plato en el lavabo y se giró para su esposo.

⎯ En verdad deseo ir al The Majestic — le respondió bastante seria — tú me dijiste que eligiera mi regalo de cumpleaños y elijo ese.

La vio pasar por su lado caminando con dificultado con su enorme vientre, Harry no pudo evitar seguirla con la mirada. Sabía bien que la pelirroja tendría la última palabra, aunque a Harry le incomodara tremendamente volver a ese hotel para tener sexo con su ahora esposa.

Suspiró dándole la ultima salchicha a Gastón aprovechando que Ginny ya no estaba presente para alimentarlo.

Verle directo a la cara a su jefa Agnes Burlington sin no sentir compasión, fue muy difícil. Ella le miró con rudeza cuando se encontraron frente a frente en el pasillo.

— Quita esa cara de lástima, Potter — le soltó Burlington y siguió de frente —

Con deseos de saber lo que había sucedido con la hermana menor de Burlington, averiguó para darse cuenta que aun seguía en San Mungo, en un estado catatónico del cual, no se había recuperado.

Dentro de todo aquello, Harry había pensado en ir tras Draco Malfoy, pero las palabras de Ginny, le habían advertido que no era precisamente por ahí, donde iban dirigidas las cosas. Si Draco Malfoy en realidad quisiera tener acceso a Ginny, no usaría a Draganov para ese trabajo, no cuando podía lastimarla a ella y a James. Asi que Harry, se concentró en su principal objetivo, el búlgaro y se reunió en su oficina con los cuatro aurores que Burlington había asignado para la protección de Ginny.

Frente a Harry, estaba el auror alto y rubio, Stevens, Thomson quien recién había vuelto después de los hechos de Siberia, Marcus Mictchell, un auror que había trabajado junto con Rivers y que recién se había unido al escuadron de Harry y McGregor. Habían asignado horarios y turnos para cubrir todo el tiempo que fuera posible la rutina de Ginny sin que ella siquiera se diera cuenta.

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