Capítulo 84 "Un día en la vida de Harry Potter"

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NOTAS PREVIAS: He andando desaparecida ya que tengo toda la semana enferma ( todo el mundo así está en casa desde hace más de una semana). Todo esta bien, sin embargo el cansancio está causando estragos en mí.

OBSERVACIONES: Estoy intentando el día LUNES subir !DOS CAPITULOS! con ocho horas de diferencia. No me puedo comprometer el horario porque todos tenemos horarios diferente, pero la idea es que puedas acceder a la lectura el mismo día (sino presiento que me matarás )

Este es un capítulo muy, muy pequeño, de transición pero necesario para entrar a la vida de Harry.

Así que nos leemos mañana.


Capítulo 84

"Un día en la vida de Harry Potter"



TRES MESES DESPUÉS


⎯ Cuando te esté hablando, mírame a los ojos — expresó Harry con la furia tratando de concentrarse —

El joven auror que tenía de frente, había estado haciendo mimos sin parar. Harry bufaba del coraje y cuando levantó la vista para encontrarse con sus ojos verdes relampagueantes de ira, inmediatamente el joven supo que estaba muerto.

⎯ Lo siento — dijo arrepentido — lo siento en verdad, pero es que es tan tierno.

Un par de ruiditos acompañado de una risita cantarina se dejaron escuchar del pecho de Harry. James de casi tres meses estaba colgado de Harry desde una cangurera, que estaba amarrada del pecho de Harry. El bebé parecía bastante divertido por las caras que le ponía el joven auror.

Harry no pudo evitar cambiar su gesto de enojo por uno de sorpresa. Sabía que James era un bebé muy carismático, más ahora a su edad y últimamente se llevaba todas las miradas a cualquier lugar donde entraba. Sin embargo, recordando los hechos ocurridos, le hizo retomar el regaño.

⎯ Bien eh — Harry miró al joven auror acongojándose para si mismo — No lo vuelvas a hacer — le reprimió levantando el dedo — ahora vete y la próxima vez que hechices a tu compañero, te suspenderé por una semana.

El joven auror agradeció con la vista y dio pasos casi tropezando con el portabebé de James que estaba en el suelo, saliendo agradecido de la oficina de Harry.

No pudo evitar suspirar de la frustración.

⎯ ¿Es verdad, James? Todos dicen lo mismo. Estoy tratando de regañar a mis trabajadores y tu, los hechizas con tu sonrisa  — Harry tomó la mano del pequeño y la apretó para después besarla. Bajó su mirada y sus ojos verdes chocaron con la mirada de Gastón. Estaba a su lado observando a su dueño tal cual si hubiese entendido lo que había dicho —

El can se acercó a James olfateando el pañal y ladró bajito como señal de alerta.

⎯ No me digas que de nuevo — suspiró Harry — James, debemos de hablar tu y yo, ocho pañales en un día es demasiado.

¿Qué tan difícil podía volverse un padre soltero? Difícil, más no imposible.

Cuando tomó la decisión de hacerse cargo de James, los abuelos Weasley dudaron que el fuera capaz y aunque agradeció la ayuda, se negó a seguir aceptándola y las primeras dos semanas trató de aprender todo aquello que fuera necesario para poder atender a su hijo, hasta que se topó que dos semanas no eran suficientes.

Varias veces corrió al teléfono, otras tantas veces odió no tener una chimenea en casa para poder contactar a la Sra. Weasley y preguntarle por qué James lloraba desesperado, en otras ocasiones dormía las siestas al costado de James para reponer el sueño que le faltaba.

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