Estiro mi brazo hacia la pequeña mesa que tengo al lado de mi cama, con el fin de apagar el despertador que no deja de sonar.
Ya son las seis de la mañana y debo levantarme temprano para prepararme e ir a la universidad en donde estudio una Licenciatura de Diseños de Interiores, por medio de una beca que me facilitaron por mi buen desempeño en las instituciones de estudios de las cuales he egresado.
Tengo veintiún años y estoy a punto de culminar mi carrera. Actualmente, estoy trabajando en una Agencia de Diseños de Interiores, pero con un cargo de asistente personal de la encargada del departamento de diseños y gracias a ella, he aprendido bastante, no creo tener problema a la hora de ejercer de lleno mi profesión, aunque lo que ahora hago es dar apoyo a mi jefa en la organización de los bocetos y diferentes documentaciones que pasan por su oficina. Sin embargo, creo mis propios diseños en mi tiempo libre, me gusta hacer volar la imaginación en los distintos espacios, ya sean grandes o pequeños, lo importante es dar mi propio estilo agregando mi marca personal que es agragar un pequeño estante con rosas y, más aún, mis favoritas, las rosas rojas.
No me afecta que mis bocetos se queden en papel y sean engavetados en mi buró.
Por ahora.
Me pongo de pie con mucha pereza, abosteso con muchas ganas estirando mis brazos, me dirijo a donde se encuentra mi computador, la enciendo y busco en el reproductor musical mi hinmo de cada mañana, Chayanne, si Keily quiere empezar el día con una gran sonrisa...
Chayanne es la solución...
Mientas la música de mi artista favorito suena por todos los altavoces del lugar con la canción "Dejaria todo".
He intentado casi todo para convencerte.
Mientras el mundo se derrumba, todo aquí a mis pies. Mientras aprendo de esta soledad que desconozco. Me vuelvo a preguntar, quizás sí sobreviviré...Canto a todo pulmón mientras me dirijo al baño y miro mi reflejo en el espejo, estoy hecha un desastre, ya que me ha tocado desvelarme por realizar mis proyectos de la universidad que se tornan aún más complejos porque son requisitos finales de las asignaturas que estoy cursando.
Mis ojos son avellanas, pestañas largas, pelo negro, abundante y largo, ahora mismo están más enredados que un nido de pajaritos.
— ¡Parezco una loca! — mascullo para mi misma.
No hay duda de eso — interviene mi conciencia.
Actualmente, vivo sola en un pequeño departamento que he rentado y gracias a Dios puedo pagar con mi sueldo que, aunque no es mucho, me da para pagar la renta, hacer mi despensa y otras cosas.
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Mi PERDICIÓN
RomanceKeily Andersson, una joven responsable que está a punto de culminar sus estudios en el área de Diseños de Interiores en una Universidad de Mérida, en la cual obtuvo una beca por su buen desempeño. Es una chica de buenos sentimientos y entusiasta que...