Keily
Después de que Marcelo me trajera a mi departamento ya pasaban de las seis de la tarde, había pasado un día muy agradable con este hombre que de una manera u otra me esta volviendo loca. Sin embargo, también hubo su parte amarga.
Estoy en mi habitación ordenando un poco ya que me había pasado estos últimos días en cama y ya mañana debo ir a trabajar y no puedo darme el lujo de dejar las cosas hechas un desastre en mi casa, definitivamente el haber salido a distraerme me había hecho bien. He tratado de no darle mente a las palabras de la tal Vanessa, aunque aun me pesa el pecho al saber que el rubio tiene una relación y la forma tan distante en la que fui tratada.
Soy de esas personas que no se deja caer fácilmente en las circunstancias difíciles, pero en ocasiones, como seres humanos que somos, nos toca caer para levantarnos con mas fuerza.
Se que he pasado por muchas situaciones difíciles, sin embargo, he sido lo suficientemente madura para hacerle frente, solo que en ocasiones se me van las fuerzas.
Diego fue un hombre importante en mi vida, mi novio por más de un año y como quiera que sea siempre me trató bien, aunque habían momentos que se molestaba porque no llegamos a tener intimidad, o porque un amigo se me acercará o si se enteraba de algún pretendiente, si me vestía como el no quería, sin embargo, el hecho de no llegar tan lejos con él es algo que agradezco porque aunque perder la virginidad con este o con aquel no es de mucha relevancia para mí, hubiese sido de mucho pesar saber que me había entregado a un idiota que no valoró nuestra relación.
Diego es un hombre guapísimo, si que lo es, pero lamentablemente su amigo que se encuentra ubicado entre las dos piernas es muy amistoso y social. Todavía no me explico como pudo presentarse a mi casa para tratar de hacerme daño, si, estaba bajo las influencias del alcohol, pero eso no le da derecho a dañar a las personas, eso no es justificación alguna.
Ahora ahí estaba Marcelo, un hombre que conocí en una noche loca, a quien sin vergüenza alguna le entregue mi cuerpo y que en momentos se comporta como un tarúpido de mierda, se ha comportado protector conmigo, es mi amigo.
El problema es que cuando pienso en esa relación de amistad sensaciones invaden mi cuerpo, cada vez que lo tengo cerca quiero más de él, quiero besarlo y abrazarlo, pero me parece imposible porque lo que tenemos son unos meses conociéndonos y días como amigos. Entonces, ahora está esta la mujer aquella que dice ser su novia o yo que sé de él.
¿Porqué no me dijo nada?
¿Porqué se comportó tan distante después que llegáramos a su casa?
Se que esto no puede ser,ya que este hombre es hermano de mi exnovio, aunque es imposible que vuelva a tener nada con Diego, no quiero malentendidos. A veces me cuestiono si es buena idea haber aceptado la amistad del rubio que atormenta mis sueños, que es capaz de remover un zoológico de animales salvajes en mi estómago y que hace que este corazón de vuelcos exagerados con tan solo de saber que lo tengo cerca.
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Mi PERDICIÓN
RomanceKeily Andersson, una joven responsable que está a punto de culminar sus estudios en el área de Diseños de Interiores en una Universidad de Mérida, en la cual obtuvo una beca por su buen desempeño. Es una chica de buenos sentimientos y entusiasta que...