≪•◦ ❈◇Capítulo 65◇❈ ◦•≫

89 18 136
                                    

Hola, mis amores!

Muchas gracias por leerme...

Este capítulo, al igual que el anterior, se lo quiero dedicar a mi cariñitooo, frangil2425, recuerda que te quiero mucho y espero te recuperes pronto.  ❤️🧡💛💚💙

Ahora si, vamos a leer...

Han pasado varios días desde que estuve con Marcelo y supo sobre Diego, se enojó bastante conmigo porque no le dije nada, no cumplí la promesa que le hice, le di su espacio para que pensara las cosas, pero a los tres días, no aguanté más y quise e...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Han pasado varios días desde que estuve con Marcelo y supo sobre Diego, se enojó bastante conmigo porque no le dije nada, no cumplí la promesa que le hice, le di su espacio para que pensara las cosas, pero a los tres días, no aguanté más y quise explicarle, lo fui a buscar, sin embargo, no lo encontré, estaba fuera de la ciudad. Lo llamé y me dejó saber que hablaríamos personalmente.

Sé que está enojado, pero también debe entender mi posición, lo nuestro es tan extraño, no sé, siquiera, si el término "lo nuestro", está correctamente empleado entre nosotros. La situación es difícil, pues mi ex novio, quien no se cansa de molestar, es su hermano.

¿Cómo voy a ir a contarle que me persigue y, en ocasiones, actúa bruscamente?

No quiero más problemas para Marcelo, también influye el sufrimiento de la madre quien volvió a buscarme para ver si me encontraba bien, me contó que Marcelo buscó a Diego y volvieron a pelearse.

—Entiendo cómo te sientes — escuché a Elena hablar —. Pero si Marcelo, no se ha comunicado es por algo. No creo que aún siga molesto.

—Creo que se ha decepcionado, rompí mi promesa— dije, sintiéndome mal por todo esto —. Pero es tan difícil...

Elena, sonrió, soltando un suspiro.

—No digas eso, estoy segura que, en cuanto se vean, van a aclarar las cosas...

Solté un suspiro profundo.

—Solo espero que este todo bien con él — dije sin mirar en su dirección.

Ambas miramos el atardecer, estamos en unas tumbonas en la orilla de la playa. Decidimos escaparnos unos minutos antes del trabajo y venir hasta aquí, lo necesitábamos.

— Lo está, no te preocupes — dijo.

En el tono que lo dijo, me hizo mirarla.

— ¿Estás bien? — Pregunté, ella me miró, sabe que le estoy preguntando por su corazón.

Dio un asentimiento con media sonrisa al tiempo que desviaba la mirada hacia el infinito mar.

—Lo estaré, Kei, lo estaré — susurró.

Ella, me duele.

—¿Lo has visto? — me miró y sus ojos estaban levemente cristalizados, le cuesta hablar del asunto —. Me refiero a...

—Sé a quién te refieres — me interrumpió rápidamente en un susurro —. Y no, no lo he visto, he tratado de no encontrármelo por el momento.

—¿Qué pasará con ustedes? — Pregunté, curiosa —. Es decir, el algún momento se encontrarán y...

Mi PERDICIÓNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora