POV SKY:
Es impresionante la forma en que una situación medianamente estable puede irse por completo a la mierda en cuestión segundos.
Cómo luego de tanto esfuerzo, fé, esperanza y cientos de preocupaciones más aún así pueden acorralarte contra el borde de un abismo frío y oscuro.
Ese en donde sabes perfectamente que al caer revivirás uno de los peores tormentos. Justo ese que sientes cuando pierdes a una persona que tanto amas.
Su corazón ha dejado de latir...
Seis palabras.
Una jodida oración que terminó por burlarme el sentido. Marcándome la vida.
Nunca llegué a considerar o imaginar que Bastian Clarck se volvería tan pero tan importante en mi día a día. A ese punto en el que el vivir toda esta situación me dejara en la negrura.
Porque eso fué lo que sentí al momento de caer en cuenta de aquella declaración. El hecho de entender que no lo volvería a ver nunca más me asfixiaba. Y sé muy bien que no era precisamente la única.
Ya que momentos antes de que a mí me sacaran de aquella maldita sala en donde desesperados reanimaban al ojiazul, su tía junto a mi hermana lloraba desconsoladamente cautivas por el miedo.
Y es que todo esto parecía tan surreal.
Él no...
El no podía estar muerto.
No así, no tan pronto...
¡No cuando tenía tanto por vivir!.
Abriendo los ojos tras resurgir de la inconsciencia breve y temporal me ubico lentamente, descubriéndome en una especie de cama fría y acomodada junto a Sean el cual no tengo ni la menor idea de cuando llegó.
—¿Qué ocurrió?— Mareada y sofocada me acomodo sobre el colchón. Con un ligero dolor en la garganta y sed molestándome.
Aún continuaba en el hospital.
El aburrido color blanco del piso, paredes y fuerte olor de los medicamentos y desinfectantes me lo indicaban.
—Te desmayaste...—Acaricia mi antebrazo preocupado—Al parecer padeciste de una muy fuerte crisis y tuvieron que sedarte de inmediato.—Abriendo los ojos de par en par me yerjo, preocupada por no poder recordar lo sucedido en los últimos minutos— Pero descuida, no duraste más de cuarenta y ocho horas y los médicos dicen que estarás bien...—
¿¡CUARENTA Y OCHO HORAS!?.
Preocupada frunzo el ceño ante el repentino dolor de cabeza, y no es hasta que diez segundos después que los recuerdos me invaden como un valdazo de agua helada sobre mi cabeza.
—B-Bastian...—Rápidamente los ojos se me inundan de lágrimas, y como puedo ordeno a mis pies a emprender la marcha en su búsqueda.
Ignorando a toda costa el quisquilloso mareo y el sentir de los músculos de mi cuerpo débiles y entumecidos.
¿Realmente llevaba dos días dormida en aquella cama?.
¡Es imposible!.
Aunque, tomando en cuenta mi considerable falta de descanso y sueño de hace una semana no vendría siendo muy descabellada aquella situación.
—¡Sky!—Mi primo me persigue, sujetándome la muñeca segundos antes de cruzar uno de los pasillos en dirección a la habitación marcada en mi cerebro como objetivo.—¡Aguarda!—
ESTÁS LEYENDO
LOS CLARCK (I)✅
Teen Fiction(EN EDICIONES). Dos familias. Un pueblo, dinero, secretos y traiciones. Romances que te dejarán con el corazón pendiendo de un hilo y pasiones que arderán al punto de quemarte. ¿Lo único seguro? Luego de su llegada, nada ni nadie saldría ileso. A...