(Entre más amor le den, más rápido subiré la siguiente parte👀)
Capítulo final
Parte I
René Saldivar
—¡Daniel y Matteo! —grito—. ¡Si no bajan ahora mismo, subiré y los bajaré a la mala!
—¿Se puede saber por qué tan gruñona? —pregunta Jackson acercándose y solo lo miro haciendo que eleve las manos en señal de paz—. Vale, me callo.
Escucho las pizadas en la escalera que me indican que ya vienen bajando.
Los últimos meses han sido un caos total. Hela empezó a dar pasos y querer comerse todo lo que está a su alcance. Hemos matriculado a Matteo en la escuela de Dan aunque fue un rollo meterlo a medidado de curso. Lo bueno es que sus notas son perfectas y entendieron el motivo de cambio de escuela así que lo aceptaron. Y Dan parece estar apurado en ser mayor que está siendo fastidioso con querer hacer cosas de niños grandes.
Por otro lado, mi trabajo ha incrementado un poco ya que por salvar varias víctimas del accidente de la escuela y la buena atención, el hospital ganó más reconocimiento a nivel mundial y muchas más personas vienen de otros países buscando lo mejor; y eso me incluye.
—Ya estamos aquí —dice Matteo que deja un beso en la frente de Sam y va a cocina mientra que Dan se queda con su hermana.
—¿Segura que tienes tiempo de llevarlos tú al colegio? —me pregunta Jackson.
—Si. Los dejaré en el colegio y a Sam con mi papá para que la cuide.
—De acuerdo —toma el saco de su traje—. Probablemente llegue un poco tarde, él jefe dijo que quería hablar conmigo.
—Bien. Te veo después —dejo un beso corto en sus labios antes de tomar a Sam y salir de casa.
Matteo y Daniel no dejan de hablar de un nuevo videojuego que ha salido y que "sutilmente" me mencionan. Es obvio que lo hacen para que se los compre. Samantha va emocionada tareando una canción en un idioma que me suena gracias a la paciente coreana que tuve hace poco y que necesitamos de un traductor para tener la consulta.
Dejo a los niños en la escuela y manejo hasta la casa de papá para dejar a Sam. Mi hija parece ser la perdición de todos ya que se pelean porque pase tiempo con ellos. Como poca novedad, mi padre ya está en la entrada esperando por su nieta.
—Hola, cariño —saluda.
—Hola, papá.
—Ah, hola a ti también, hija.
Frunzo el ceño pero ni siquiera se da cuenta por estar embobado con su nieta.
—Vendré por ella cuando termine mi turno —le digo alcanzandole la mochila donde está todo lo que necesita Sam.
—Puedes venir por ella después de descansar. No hay problema —asegura—. Lindo auto, por cierto.
—Jackson me lo regaló.
—Veo que elegiste buen esposo. Aunque creía que era un prostituto cuando eran adolescentes.
—Es porque lo era.
—Tienes razón.
—Nos vemos luego, papá.
—Ten cuidado al manejar.
—Lo tendré.
***
Paso mi mano por mi cuello intentando que el dolor en este se calme un poco. Pasar tantas horas en cirugía me está pasando factura.
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ERES MI PERDICIÓN
RomansaRené y Jackson han sido mejores amigos desde que tienen cinco años gracias a que sus padres son muy unidos. Los chicos van creciendo y sus sentidos lujuriosos también. ¿Como tomarán la situación cuando estos deseos carnales empiecen entre ellos si...