Perfect Boy ✦ ≪JinKook≫

서른하나:31

NamJoon había regresado con los demás chicos en la sala social, mientras que JungKook aún se mantuvo en la cocina por unos minutos, pensando en lo que el otro chico había dicho.

Tal vez NamJoon tenía razón. Seguramente había un problema ahí del que SeokJin tendría que ocuparse. JungKook podría apoyarlo en ello, pero eso no hacía que dejara de sentirse molesto. No era como si su novio no hubiese sido consciente de lo que había dicho.

Se seguía preguntando por qué SeokJin quiso ser su pareja si no había algo en él que el castaño estuviera buscando. Y pensó que quizá era el karma por lo que le había hecho a JiEun.

Aún así, se rehusaba a aceptarlo.

Cuando JungKook entró a la sala, SeokJin se acomodó para que el pelinegro pudiera sentarse cómodamente sobre sus piernas de nuevo, pero vaya sorpresa se llevó cuando lo vio cargando una silla.

—JiMin, traje una silla del comedor, espero que no te moleste.

—Oh, no. Descuida.

—Creí que ibas a sentarte en mí —comentó SeokJin.

—Me siento más cómodo aquí —respondió JungKook, dejando la silla a medio metro del asiento del castaño, y luego se sentó.

SeokJin empezó a sentir que algo andaba mal hasta que vio que JungKook lo ignoraba en algunas ocasiones. Evitaba verlo, apartaba su mano cuando SeokJin intentaba colocarla sobre su muslo y respondía a sus comentarios de manera un poco gélida, todo lo contrario a cuando le respondía a NamJoon, HoSeok o JiMin.

Al cabo de una hora, el taxi que JungKook había pedido ya estaba esperándolo frente al edificio.

—Espero volver a verte —comentó JiMin.

—Igual —respondió el pelinegro con una sonrisa—. Fue un gusto estar aquí con ustedes. Buenas noches.

SeokJin se levantó del sofá para alcanzarlo afuera del apartamento, le hizo sentir mal el hecho de que JungKook ni siquiera le miró cuando se despidió. Había dejado la puerta abierta, así que los otros tres presentes observaban la escena.

—Oye, ¿no vas a despedirte de mí?

Se acercó más al pelinegro. Pasó una mano por su cintura y se inclinó hacia él para besar sus labios. No obstante, JungKook giró su rostro hacia un lado para impedirlo y apartó la mano de SeokJin.

—Buenas noches —fue lo único que el pelinegro dijo antes de retirarse.

SeokJin se quedó en el pasillo, desconcertado.

Una vez que el pelinegro desapareció por el ascensor, volvió a entrar al apartamento y soltó un sonoro suspiro luego de cerrar la puerta.

Cuando su mirada subió hacia sus amigos, estos tres desviaron la mirada hacia cualquier otro lugar como si no hubiesen sido testigos de aquel rechazo. Sin embargo, para SeokJin era obvio que lo habían visto todo.

—Creo que se molestó conmigo.

—¿En serio lo crees? —ironizó NamJoon.

—Fue mi culpa, no debí preguntar esa estupidez —dijo JiMin.

—No fue tu culpa —esta vez habló HoSeok—. La culpa fue del idiota que no supo controlar qué decir.

Y ahora los tres dirigieron su mirada hacia SeokJin, quien aún lucía muy confundido, como si sus amigos estuvieran hablando en clave.

—¿Me estoy perdiendo de algo? —preguntó SeokJin con algo de frustración.

—Dijiste frente a tu novio que los tipos mayores son mejores —le recriminó HoSeok.