Huéspedes

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—¿Cuándo se supone que llegarán?—pregunté algo ya fastidiada de esperar a la visita de Hayes y a Dylan.

—No lo sé,se supone que Dylan llegaría a las cuatro y media.—contestó Amé mirando su reloj con una mueca.

Detrás de ella estaba Cameron siendo sostenido de los brazos por Nash para evitar que Cameron se le lanzara encima a Dylan, y para reforzar la seguridad, Tyler, Carter y Shawn están alrededor de Cameron en forma de ataque por si se le escapaba a Nash.

Esto sí es seguridad,señores.

—¿Cómo se supone que se llama la chica, Hayes?—me voltee a mirar a Hayes ya que ni siquiera me sabía el nombre de su invitada.

—Se llama Tina.—me sonrió y volvió a su platica con Johnson.

—Yo que tú no estaría tan segura.—Mahogany apareció a mi lado con una mueca en el rostro.

—¿Por qué? Sólo es una chica.—dije obvia.

—No,no sólo es una chica.Ella a querido estar con Hayes desde que sus madres son amigas, siempre se le ha insinuado pero Hayes la rechaza, no dudo que esta vez no sea la excepción al insinuársele, aún sabiendo que está contigo—torció el gesto—.Mira,ahí viene...

Volteé hacia donde Mahogany me señalaba y vi una camioneta blanca acercarse a nosotros.De ella se asomaron unas piernas trabajadas y bronceadas, después el cuerpo completo de la chica; castaña, bronceada y con el cuerpo desarrollado.

Pasé saliva evitando que mi boca se abriera por la impresión al creer que vendría una niñita de doce y no una jodida Adriana Lima.

Bueno, al menos tengo los dientes fuertes según mi dentista.

—¡Hayes!, ¡Nash!—salió de la camioneta y corrió hacia ellos tratando de parecer "sexy", dejándome aún más sorprendida.

Ah perra, ¿por qué corre? Están a medio metro de ella.

—Que grandes están, ¡mírate Nash!—lo señaló de pies a cabeza y lo recorrió con la mirada.

¡Ah ósea también con Nash, también con Nash!

—Y tú,Hayes.

Oh no.

—Ya no eres un bebé.

Hayes tragó saliva nervioso y volteó a mirarme buscando ayuda.

Ok, hora de mi entrada.

—Hola soy la novia del que ya no es un bebé, lo sé muy bien, ¿sabes?—le guiñé el ojo y Hayes me abrazó por la cintura.

—Ah, soy Tina.—hizo una mueca disgustada y apenas me vio al extender su mano.

Miré su mano y con una sonrisa fingida hablé.

—Oh, no gracias, yo no sé donde ha estado esa mano.

Y los chicos aguantaron una carcajada.

—Como sea—puso los ojos en blanco—. Hayes, ¿me podrías ayudar con mis maletas?—pestañeó de manera dulce y creí que se caería su pestaña postiza.

—Ahm...—Hayes volteó a verme.

—Claro amor.Ayúdala, por mí no hay problema.—sonreí y parada de puntitas besé sus labios dejándole un hermoso ángulo de nuestro beso—.Nos vemos dentro, amor.

Entraron y me acomodé al lado de Amé con total tranquilidad.

—No te agradó, ¿cierto?

—¿Por qué le agradaria? Prácticamente viola a Hayes con la mirada, al menos a mí no me agradaría si fuera Ayleen.—Cameron llegó a nuestro lado aún siendo sostenido por Nash y Shawn con Tyler y Carter alrededor de él.

Cuando ya no este ; Hayes GrierDonde viven las historias. Descúbrelo ahora