Grace.
-¡¿Tambien a ti te llego?! -Grito asombrada atravez de la línea.
-Si, ayer por la tarde, llego a mi universidad. -Kylie explica.
-Oh por dios... ¿Pero tu si mandaste la solicitud?. -Pregunto.
-No mande nada. -Dice.
Cierro los ojos con fuerza, primero yo y luego ella... ¿De que se trata esto?
-¿No crees que esto sea una broma pesada de alguien? -Murmura.
-No lo creo -Niego. -¿Leiste lo que está más abajo, debajo de las letras en cursiva?
-Si ¿Lo que decía sobre conocer a su majestad la Reina? -Kylie repite las palabras del documento. Asiento, conscientemente de que no puede verme.
-No lo sé Meredith, no cualquiera tomaría mis informaciones personales y las enviaría hasta Inglaterra por que sí. -Ella tiene un muy buen punto.
-¿Entonces que vamos a hacer? Ya lo hable con mis padres y ellos piensan lo mismo que tú me has dicho, que solo es una broma pesada. Pero y si no lo es... ¿Y si de verdad ya estamos dentro?
-¿Has intentado comunicarte con alguien de allá? -Ella contesta con otra pregunta.
-Ni siquiera se me ha pasado eso por la mente Kylie, tengo miedo. -Me sincero.
-No creo que logre hacerte mucho por teléfono Meredith. -Kylie se burla y yo le ruedo los ojos al libro de anatomía que tengo frente mío.
-Bueno, tratare de tomarme un tiempo para llamar hasta Inglaterra y verificar que todo este desastre no sea una broma. -Digo.
-Cualquier cosa será mejor que me llames. -Ella comenta.
-Te hablo más tarde. -Asiento y colgamos al mismo tiempo.
Esto está más que retorcido, a Kylie también le ha llegado la carta de aceptación. Cierro mi libro de golpe y dejo mi celular a un lado antes de pegar mi frente con la pasta del libro. Tengo que pensar en qué diablos voy a decir una vez que marque el número que viene marcado en la hoja. Puedo empezar desde que abrí el sobre y leí la carta, para después enfocarme en investigar quién diablos hizo todo esto. Sí, eso es justamente lo que voy a hacer.
Me levanto de la mesa y me acomodo los pequeños mechones de cabello que se han acomodado en mi frente, hacia atrás.
Tomo mi celular nuevamente y saco el pedazo de papel antes de marcar los dígitos que resaltan en letra cursiva.
Mis manos tiemblan por la ansiedad que me provoca todo esto.
El celular suena tres veces antes de ser levantado y contestado.
-Centro de alto rendimiento Nacional de Voleibol. Habla Lily ¿En qué puedo ayudarle? -El acento tan profundo y marcado de la chica que ha contestado el teléfono, casi hace que confié ciegamente que esto es verdad.
-Hola, me llamo Meredith.... Fallas. -Yo tartamudeo. -Estaba buscando información sobre una solicitud de admisión. -Me explico.
-Meredith Fallas... -Ella prueba mi nombre en sus labios mientras hace una pausa. Posiblemente está buscando algo entre papeles. -Sí, aquí estas... Chica americana-mexicana que ha sido aceptada hace no menos de cuarenta y ocho horas, dime en que soy buena. -Ella murmura mientras que a lo lejos se escuchan las teclas de alguna computadora.
-Es que tengo un problema con los documentos... -Yo empiezo.
-¿Algún papel esta mal?. -Ella jadea.
-No, no es eso, es que... Voy a ser directa por que quiero respuestas ¿Si?
-Se directa entonces. -Ella concuerda.
-Yo no fui quien ha hecho el papeleo para meter solicitud al equipo. -Cierro los ojos esperando algúna reprimenda sobre ello, pero nunca llega, en cambio, una risita tonta se escucha a través de la línea.
-Oh querida Meredith, por supuesto que no fuiste tu. -Ella rie y yo frunzo el ceño no entendiendo nada.
-¿Ah no? No, es decir, no, no fui yo, fue alguien mas.... Pero no se quien fue. -Explico.
-¿Estas jugando conmigo no es así? -Ella rie.
-Quisiera que esto fuera un juego, pero no... No estoy jugando a nada.
-Oh, lo siento, me están informando que el Señor Tomlinson no nos comentó nada acerca de que usted no sabia nada de nada...
Mi mandibula cae al piso y todo empieza a dar vueltas.
-Creo no haberla escuchado bien. -Quiero creer que esto es una mentira, que esto es una sucia mentira.
-Acabo de decirle que el Señor Louis Tomlinson no nos digo nada sobre... -Ella repite y siento ganas de vomitar.
-¡Si la escuche! -De repente grito.
Un enojo descomunal se forma dentro de mi y tengo miedo de que no pueda ser capaz de controlarlo. Si tuviera a Louis frente a mi lo golpearía innumerables veces hasta lograr sacarle hematomas en la piel.
Estoy siendo demasiado grosera con la secretaria del centro deportivo, ella no es culpable de mi enojo, pero no encuentro otra manera de desahogarme. Lleno mis pulmones con aire antes de disculparme.
-Siento tanto haberte gritado, es solo... es solo que... -Bufo.
-No te disculpes... yo también me hubiera molestado si yo no fuera la que haya metido la solicitud de admisión por mi cuenta. -Su voz es comprensiva.
Paso mi mano por mi rostro y me levanto de una buena vez de las bancas del patio de la universidad rumbo hacia el gimnasio donde entreno.
-Entonces todo lo que esta en el documento que me han mandado... ¿Es cierto?. -Mi voz sale en un susurro.
Estoy a solo metros de la entrada, asi que acelero el ritmo de mis pasos para asi adentrarme en el.
-Si, absolutamente todo es cierto y tocando nuevamente el tema... ¿Contamos con su presencia para el primero de Febrero? -Ella pregunta mientras tomo los pasamanos de las escaleras que dan hacia la cancha.
-La verdad no lo se... -Dudo.
-Escucha, si te hace sentir mejor... No muchas personas son aceptadas en la selección. -Ella murmura.
Bajo un escalon tras otro, hasta estar pisando la suela de goma de la cancha.
-Espero estar ahí para ese entonces. -Asiento y meto mi mano libre a mi bolsillo.
-Te veo entonces. Suerte. -Ella dice y cuelga.
Guardo mi celular en mi bolsillo trasero y dejo el libro de anatomía a un lado sobre el suelo antes de caminar hacia el estante donde los balones descansan. Tomo uno en mi manos y corro con el a la línea de saque, antes de lanzarlo hacia arriba y levantarme sobre mis talones, gravitando sobre el aire antes de pegar con fuerza con mi mano derecha.
-Aun tienes el toque... -La voz de un hombre resuena por todo el gimnasio.
Por instinto miro de donde salió la resonancia de aquella voz, pero cuando me doy cuenta de quien es, siento que quiero vomitar y llorar a la vez.
-Niall... -Tartamudeo con miedo.
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Eighteen H. S
FanfictionContinuacion de "Fourteen" Cada cabeza es un mundo... Y todo mi mundo se me viene abajo cuando decido quererme un poco y ponerme a mi en primer lugar, y a él... hasta el final. Este es nuestro propio infierno hecho a la medida.