-¿Qué piensas hacer ahora? –El me pregunta.
Ambos estamos parados fuera de la pizzería. No sé a qué se refiera, porque si me pregunta a donde me pienso dirigir, ¿A donde voy a pasar la noche? Lo más seguro es que le diga que me lleve al hotel de Kylie. Me estado mensajeando con ella durante la tarde, para llenar el hueco que siento en el estómago. Y si él está preguntando por lo otro, sobre todo este rollo acerca de Harry, para ser sincera, ni siquiera sé que pensar.
-¿Tienes donde quedarte? –El me pregunta, sacándome de mis pensamientos.
-Kylie me dijo que tenemos que conseguir un apartamento. Pensamos vivir juntas. No es como en mi universidad de que pagas por las habitaciones, cada vez que tienes que pagar el semestre. –Le explico.
-¿Entonces...
-Entonces por el momento nos quedaremos en el hotel que ella consiguió. –Me encojo de hombros. –Es económico y acogedor, o eso es al menos lo que Kylie me dice.
-No tienen por qué quedarse en un hotel Meredith, ambas pueden quedarse en mi casa. –Louis hace una pequeña sonrisa.
-No Louis, gracias, pero ya hiciste demasiado por mí el día de hoy. –Le digo con vergüenza.
-No te he visto durante meses y somos amigos, es lo menos que puedo hacer por ti, después de haberte soltado así las cosas. –Él me explica y yo niego. –No seas terca mujer. Vamos, sube al automóvil, vamos por Kylie y vayamos a Doncaster. ¿Qué diablos van a hacer en Londres, las dos solas, durante una semana entera?
-Ah... ¿Conocer la ciudad? –Me rio. –Y para que lo sepas, no estamos solo las dos. –Anuncio. –El hermano de Kylie también viene.
-¿Jhon? –Arquea una ceja.
-Sí, el mismo.
-¿Qué es de el? ¿Ya se consiguió a una zorra? –Se burla. –Siempre considere a ese tipo como alguien callado.
Me muerdo el labio para no reírme.
-Este... Pues sí, ya se consiguió a alguien. –Me rio.
-¿Ah sí? –El parece sorprendido. -¿Cómo se llama esa loba? –Se ríe.
-¡Oye! –Niego con la cabeza. –Soy yo Louis.
La mandíbula de Louis cae al suelo y se queda atascada ahí.
-¡¿Qué diablos Meredith?! –El grita. –Perdón por llamarte de ese modo, pero si tú me hubieras dicho antes...
-No te preocupes, no lo sabias. –Me encojo de hombros.
El niega con la cabeza y me mira estudiándome. Sé que tiene millones de preguntas, pero sinceramente, ahora no es el momento.
-¿Entonces vamos por Jhon y por Kylie? –El de repente dice.
-Que conste que tú nos estas invitando. –Le advierto.
-Sí, que conste. –Él se burla y me rueda los ojos con gracia.
Subimos a la camioneta. Le pido la dirección de su hotel a Kylie, y después de un par de minutos, ya estamos bajando nuevamente de esta para entrar al vestíbulo.
Le mando un mensaje de texto, para decirle que estoy en la recepción y que baje.
-Tiene tiempo que no la veo... Mucho tiempo. –Murmura.
-Yo tampoco la he visto desde los partidos de exhibición. –Le digo y el asiente, antes de desparramarse en uno de los sillones de cuero del vestíbulo, mientras que yo empiezo a pasear por la habitación.
Escucho a lo lejos la risilla de Jhon, junto con el quejido de Kylie por las escaleras, así que me giro a ella y una risa se me escapa, es inevitable que peleen. Al cabo de unos segundos, Jhon y su hermana dan vuelta en la esquina de las escaleras, y una vez, que Jhon clava sus ojos en mí, una sonrisa gigantesca se dibuja por todo su rostro y da un salto a los últimos escalones, para empezar a correr hacia mí.
-Mery. –El susurra cuando se posa enfrente mío.
-Hola Jhon. –Le sonrio y lo abrazo. El hace lo mismo y deposita un beso en la coronilla de mi cabeza.
-Diablos. Te extrañe demasiado. –El murmura contra mi cabeza.
-Yo también te extrañe. –Le digo y me alejo un poco de el para saludar a Kylie.
La relación que tenemos él y yo, es lo suficientemente incomoda como para mostrar muestras de cariño en público, así que me reservo a tomarlo de la mano y a apretarla, el solo me sonríe con dulzura.
-¡Meredith! –Kylie brincotea hasta llegar hasta mí. Le ha crecido notablemente el cabello y se ha depilado la ceja.
-Hola Ky... -Antes de que termine, ella estampa su cuerpo contra el mío, haciéndome jadear de dolor.
-Tenía tantas ganas de verte. –Jura y se aleja de mí, aun tomándome de los brazos.
-Yo también. –Sonrió. –Llegue aquí por la mañana, no puedo creer que no me hayas mencionado que venias antes. –Niego con la cabeza.
-Tampoco puedo creer que no me hayas dicho que venias después. –Me rueda los ojos. –Estamos a mano. –La mirada de Kylie pasea por la habitación, hasta detenerse en un lugar fijo detrás de mí.
Cuando volteo, Louis le está dando la mano a Jhon. Louis lo mira tratando de medir su comportamiento, también esto es incómodo para él.
Me acerco a ellos con Kylie pisándome los talones.
-¿Cómo están los chicos? –Jhon le pregunta a Louis con una sonrisa de oreja a oreja. Por lo menos ya va a tener algo de qué hablar en la universidad.
Miro a Louis y el hace una mueca.
-Oh, ya sabes... Como siempre. –Se muerde el interior de la mejilla.
Después de unos largos e incomodos minutos, Louis y yo les explicamos a Jhon y a Kylie nuestros planes. Al principio, Jhon se ve fuera de lugar, y hasta puedo decir que se ve incomodo, mientras que a su hermana se le ilumina el rostro.
Desde un principio, sé que para Kylie, esto es duro, y lo sé porque para mí lo es también. El tener que lidiar con los amigos de un ex... Pero lo está manejando realmente bien, el tener a Louis frente a ella y estar serena y radiante como la mañana.
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Eighteen H. S
FanfictionContinuacion de "Fourteen" Cada cabeza es un mundo... Y todo mi mundo se me viene abajo cuando decido quererme un poco y ponerme a mi en primer lugar, y a él... hasta el final. Este es nuestro propio infierno hecho a la medida.