𝐋𝐎𝐕𝐄 𝐌𝐀𝐃𝐄 𝐌𝐄 𝐂𝐑𝐀𝐙𝐘 [𝖱𝖤𝖨𝖭𝖤𝖱 𝖡𝖱𝖠𝖴𝖭] (EDITANDO)

──𝟎𝟐𝟎

20. LAS RISAS NUNCA DURAN PARA SIEMPRE

──No te distraigas. ──le menciona Auruo a Eren al escuchar sus susurros casi inaudibles para nosotros.

──Ya pensarás luego. Por ahora nos alejaremos y esperaremos ──avisa Petra.

──Está bien.

Supongo que si voy a utilizar este titán tendré que practicar más con mis poderes, ¿verdad?

Cerré los ojos, tratando de ver lo que estaba pasando con la titán. Pero solo vi negro. Estuve algunos minutos tratando de conectarme con Levi o con Erwin. No podía. Dejé de hacerlo y me concentré en huir de ese lugar. Quería alejarme lo más que pudiera de ella.

Estoy muerta de miedo y me aterra lo que ella pueda hacer si escapa.

Después de unos minutos en los que nos alejamos lo suficiente del titán, amarramos a nuestros caballos y subimos a las ramas de los árboles.

──El comandante Erwin, lo planeó todo desde un principio, ¿verdad? Entiendo que no se lo contara a los reclutas, pero ¿por qué no se lo dijo a veteranos como ustedes? ──preguntó Eren.

──Cierra la boca, Eren. ──le reclamó Auruo.

──¿Insinúas que el comandante y el capitán no confían en nosotros? ──protestó Petra alarmada.

──Pero Eren tiene razón. ¿Por qué no les dijo el capitán?

──¡Petra, arráncale los dientes! ──gritó Auruo.

──No, ellos tienen razón. ──dijo Erd calmado y sin mostrar ni una sola expresión en su rostro ──El comandante tenía una razón para no confiar en nosotros.

──Seguramente porque piensa que la persona que está detrás de esto es alguien de nosotros. Puede ser de los nuevos o incluso un veterano. ──hablé dándole la razón a Erd.

──Sí, Rin tiene razón. El único motivo por el cuál no podrías fiarte de tus compañeros, es el simple hecho de que en la Legión hay un espía que puede transformarse en titán.

──¿Un espía? ¿Eso es posible? ──preguntó Eren.

──Como mínimo, el comandante está seguro de ello. Probablemente solo informara sobre la misión a los que llevan más de cinco años dentro.

──Seguro debe ser eso. ¿Lo entendiste, Eren? Ese es el motivo. ──le dice Erd a Eren mirándolo de reojo.

──En este caso, era inevitable. Puede ser que esté asumiendo que hace cinco años cuando destruyeron la muralla, se infiltró un espía. Así es como delimitó a los sospechosos.

──Probablemente, se infiltraron más. Y si no me equivoco, podrían ser los que se transforman en el titán acorazado y en el titán colosal. ──dije yo mirando a Eren.

──¿Será la misma persona que asesinó a Sawney y a Bean?

──Puede ser. Eren, tal vez por eso, nos preguntó aquello, ese día. ──dije para luego sentarme en la rama en la que nos habíamos parado con la cabeza gacha y mis brazos apoyados en mis rodillas.

Dejé de escuchar a la conversación para sumirme en mis pensamientos.

¿Será alguien de los reclutas? ¿Será alguien que no está aquí? No sé nada... Solo no quiero morir. ¿Por qué tenía que pasar justo ahora? Justo cuando estamos en un momento crítico. Se suponía que esta misión iba a salir bien y definiría nuestras habilidades en el campo de batalla. Hasta ahora solo han muerto compañeros. Sé que dije que los dejáramos morir cuando ya estuvieran en manos de un titán, pero definitivamente, no me esperaba esto.