𝐋𝐎𝐕𝐄 𝐌𝐀𝐃𝐄 𝐌𝐄 𝐂𝐑𝐀𝐙𝐘 [𝖱𝖤𝖨𝖭𝖤𝖱 𝖡𝖱𝖠𝖴𝖭] (EDITANDO)

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"Enemigos comiendo juntos."

Rin

-Ten Hange. –le di a Hange las papas que estaba pelando.

-Gracias. ¿Alguien más quiere ayudar? –dijo Hange, siendo ignorada por los demás.

-Compartir la comida con quienes te matabas. Que interesante. –habló Magath. -¿Qué los hizo cambiar de idea?

-El retumbar. –respondí. Se iban a terminar matando si nadie hace nada.

-¿Por qué? Si Eren Jaeger termina el retumbar, les dará la vida soñada a ustedes. Un paraíso para los demonios de esta isla

-Capitán, si quiere mantener la poca paz que hay ahora, le sugiero que las ideas se las guarde para sí mismo. –respondí, terminando de pelar la última papa.

-Ustedes lograron que Zeke y Eren entraran en contacto. Si no hubieran interferido, esto no estuviera pasando. –El maldito de Magath quiere empeorar las cosas.

Icónico

-Ya se lo explicamos, capitán. No queremos que haya una matanza. –interfirió Hange

-¿Ahora quieren pelear por la justicia?

-¿Justicia? –Jean comenzó a afectarse por las provocaciones de Magath. -¿Tú nos hablas de justicia? ¿Somos los malos por enfrentarnos a los titanes que nos enviaban? ¡Nos dejamos la vida peleando para que no nos devoraran! –Jean se acercó a Magath con ira. -¿Eso nos convierte en demonios?

Me levanté de mi puesto, para evitar que Jean hiciera algo que empeorara las cosas.

-Jean. Tranquilízate. No logras nada haciendo esto. –le dije alejándolo de Magath. –Él es así, busca provocarlos. No lo dejes.

-Sí. Para mí, ustedes no son más que demonios. La creencia de que Paradis era peligrosa, se convirtió en una realidad. Este es el resultado de su resistencia.

-Si no se hubieran devorado a nuestra madre, cuando cayó la muralla, Marley no estaría en peligro. Y Eren sería muchísimo más diferente ahora. –Respondí. Hice que Jean se sentara a un lado de Hange para que se tranquilizara.

-¿Ahora vamos a hablar de historia? Ustedes saben muy bien que Eldia sometió a Marley primero.

-Es ridículo que quieras victimizarte por algo que sucedió hace más de dos mil años, Magath. Si solo vas a expresar tu infinito odio hacia ellos, solo quédate callado. –mascullé con molestia. Me senté en el otro lado de Hange para poder servir tazones de estofado para los demás.

-Ya basta. Hablar de un conflicto que ni siquiera vimos, es infantil y aburrido. Jean, es que nuestra presencia afecta al capitán. Somos demonios diferentes, unos que quieren salvar a los que desean eliminar a la isla. –habló Hange. –Vivimos en el exterior y no somos unos ignorantes demonios ahora.

-¿Y bien? ¿Podrán matarlo? –pregunto Annie

Me quedé quieta con un tazón en mano, y sin darme cuenta de lo caliente que estaba.

-¿Podrán matar a Eren?

-Matarlo no es la única forma de detener esto. –habló Mikasa.

-Supuse que dirías eso, Mikasa. ¿Piensan convencerlo para que pare? Pretende pisotear a la humanidad, no cambiará de idea tan fácil.

-Eso no lo sabemos si no hablamos con él. –habló Armin, esta vez

-Supongamos que pueden hablar con él. ¿Y si no accede a parar? ¿Acaso se vuelven idiotas cuando Eren es su enemigo?