𝐋𝐎𝐕𝐄 𝐌𝐀𝐃𝐄 𝐌𝐄 𝐂𝐑𝐀𝐙𝐘 [𝖱𝖤𝖨𝖭𝖤𝖱 𝖡𝖱𝖠𝖴𝖭] (EDITANDO)

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"Aparición del titán colosal."

Narrador omnisciente

-Les digo que Annie seguro que está bien. No la estarán torturando. ¿No crees que eso es lo menos probable? Con nuestros poderes siempre acabamos solo con un rasguño. Y estamos hablando de Annie. Estará practicando sus patadas escondida en algún lado.

-Pero podemos estar seguros de que descubrieron su identidad –le dice Reiner al mayor

-¿Eso significa que aún no están decididos? –ellos bajan la mirada. –Ya veo. ¿Y de qué sirvió el acuerdo que realizamos recientemente? Podemos repetirlo, Reiner. Pero si pierdes, entregarás esa armadura a otro guerrero. Agradece que estoy dejando que Rin venga con nosotros. Sabes que allá no la recibirán bien por venir de las murallas. –el menor baja la mirada y se disculpa. –Céntrense. Solo tenemos un objetivo. Recuperar la coordenada y al titán de Rin y por fin, terminar con esta historia maldita. Acabemos con esto. Quiero ponerle fin a esto.

-Entendido. Dejaré de pesar en Annie por el momento. Nadie más debería vivir este infierno. Nunca más. Acabemos con esto. –habla el pelinegro.

El silencio reina por segundos antes de que una voz lo interrumpiera.

-Jefe de guerra Zeke. Se acercan tropas enemigas, están al pie de la montaña.

-Bien. Valerosos guerreros, es hora de acabar con esto y cumplir nuestra misión. –terminaron su té e iniciaron su recorrido hacia sus escondites.

-Vamos. Berthold, sé que te lo repetí mil veces, pero vamos a estar en puestos alejados. Actúa pensando por tu cuenta. No dependas solo de mis órdenes. Eres el que posee la mejor habilidad de todas, pero dependes demasiado de los demás. Hasta ahora no fuiste de mucha ayuda.

-Ya lo sé.

-Hasta ahora. Terminaremos con esto aquí.

-Sí, ganaremos y acabaremos con esto.

-Mantén esa actitud hasta que veas a tu querida Annie. Incluso ella verá como un príncipe al tipo que vaya rescatarla. Aunque seas tú. Y rescataremos a Rin y a Christa. Se lo prometí a Ymir.

-Sí, lo haremos. Cuento contigo.

-Y yo contigo. –ambos amigos se despidieron y se dirigieron a sus respectivos lugares para poder esperar a la Legión, que venía en camino.

El rubio tenía nervios por lo que resultaría en esa batalla, y aun así que su amada meses atrás le prometió ir con él hasta al infierno, se sentía inseguro respecto a la decisión de ella.

Aun el pelinegro seguía oculto, y todo seguía según su plan, excepto el hecho de que su amigo rubio se haya trasformado en titán hacía ya rato, pero no dio la señal que se utilizaría para dar inicio a la transformación de Berthold.

Rin

La mitad de la cabeza de Reiner no se encontraba, estaba totalmente inconsciente y probablemente muerto. Su cuerpo se asomaba de entre la nuca del acorazado y estaba aún unido a él, pues todavía el titán no se desintegraba. Los gritos de felicidad de los soldados de la Legión se escuchaban, pero no de todos, Connie y Sasha lloraban desconsolados por el reciente acto.