La momia 2

67

Vail trata de aprovechar la distracción de Xtabay para presionar el brazalete de su mano izquierda y así suministrarle la dosis del calmante, pero ella se da cuenta y esconde la mano.

- Xtabay: (ríe) Poniendo en práctica lo que Amelia les acaba de mostrar ¿eh? (ríe de nuevo). Buen intento ¿Vail? (Henry trata de hacer lo mismo, pero ella vuelve a mover el brazo). ¡Oh Henry! (tono sarcástico y sensual) No voy a permitirlo.

- H: (enojándose) ¡Tráela de vuelta!

- Xtabay: No puedo, porque fue la misma Amelia quien me pidió que tomara su lugar (alza los hombros y sonríe muy feliz).

- H: (no le cree) ¡Te exijo que me dejes verla Xtabay!

Xtabay se aleja de él, camina rumbo a las flores que están en las cúpulas detrás del escritorio de Henry. Aquella que está marchita, que representa a Amelia y el cactus con apenas una flor, a lo que ella con un movimiento de manos hace que le salgan más flores.

- Xtabay: Así está mucho mejor (sonríe al verlas).

- H: (ella voltea a verlo) ¿Qué quieres¡, ¿qué es lo que quieres para que liberes y regreses a Amelia?

- Xtabay: (sonríe porque está incrédula) ¿En serio me darás cualquier cosa por traerla de vuelta? Alguien debe estar verdaderamente desesperado para preguntar por lo que quiero a cambio (sonrisa coqueta). Dime una cosa Henry, ¿cómo sabes que no miento?, ¿realmente crees que es cierto lo que te digo sobre que Amelia provocó que yo estuviera aquí y que no te estoy tendiendo una trampa?

- H: Te creo (una respuesta muy firme).

- Xtabay: (se acerca a Jekyll, le toca el pecho, se le pega y, al igual que con Nick, lo toca con sensualidad) Sigues oliendo tan bien como cuando te conocí (ella sonríe).

Xtabay se acerca mucho más a Henry, toma unos segundos para analizarle el rostro por completo, sonríe y se acerca a su costado para susurrarle al oído.

- Xtabay: Déjame verlo (Jekyll traga saliva, se pone nervioso). Eres lindo, pero no eres mi hombre, déjame ver a mi Eddie (ella sonríe malévolamente).