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Pasó un día, ni Jenny o Malik pudieron encontrar una alternativa al plan, por lo que todos se disponen a prepararse para la batalla.

Xtabay camina cerca de los hombres que se sacrificarán, mientras ellos preparan sus armas, ella les lanza sonrisas pícaras. Sigue su camino, pero se detiene cuando ve sentada a Jenny en un rincón, pone sus ojos en blanco y se acerca, el único ruido que se escucha en ese vacío lugar es el golpeteo de sus tacones contra el frío piso.

Jenny la ve, rápidamente se voltea, se quita las lágrimas con las manos y se comporta a la defensiva.

- J: ¿Qué, vienes por otro golpe?

- Xtabay: No, de hecho, venía a burlarme de que estuvieras llorando (ella ríe, pero Jenny solo le dedica una mirada de enojo). Oye, solo era un chiste, se supone que debes reír.

- J: ¿Reír? ¿Quieres que me ría de una broma absurda? (finge su risa) ¡Oh sí! ¡Que graciosa eres! ¡Mierda! ¡¿Cómo esperas que me ría si estoy a punto de embarcarme en el último viaje de mi vida?! Sabes que moriré, ¿verdad? Tú puedes regresar, pero yo... (se señala) ¡yo no! ¿Sabes qué es eso? ¿Sabes... imaginas por un maldito segundo lo que es tener que dar tu vida por salvar a una maldita civilización? O ¿acaso sabes qué se siente morir? O ¿siquiera sabes lo que es amar a alguien y tener que sacrificarte por esa persona? Aunque claro, no tiene caso, porque ese alguien tampoco sobrevivirá y lo que haces por amor es inútil, porque ¡jamás estarán juntos! (grita con lágrimas en los ojos).

La momia 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora