Dios es la luz

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La luz sirve para darnos claridad, así podemos caminar sin tropezar. Cuando nos caemos o tropezamos es porque caminamos distraídos o hay oscuridad.

5 Este es el mensaje que hemos oído de él y que les anunciamos: Dios es luz y en él no hay ninguna oscuridad. 6 Si afirmamos que tenemos comunión con él, pero vivimos en la oscuridad, mentimos y no ponemos en práctica la verdad. 7 Pero, si vivimos en la luz, así como él está en la luz, tenemos comunión unos con otros, y la sangre de su Hijo Jesucristo nos limpia de todo pecado

1 Juan 1:5-7

Para saber que somos verdaderos hijos de Dios no debe haber oscuridad en nuestra vida, es decir no practicar un pecado. En ocasiones podemos caer pero debemos acudir a nuestro Dios por el perdón. Dios es luz, en Él no hay oscuridad, Dios es Santo y en Él no hay pecado.

Es una gran bendición que la sangre de nuestro Señor Jesucristo nos limpie de todo pecado, porque no hay nada más que pueda hacerlo, ninguna obra humana es suficiente solo gracias a ese sacrificio en la Cruz.

8 Si afirmamos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos y no tenemos la verdad. 9 Si confesamos nuestros pecados, Dios, que es fiel y justo, nos los perdonará y nos limpiará de toda maldad. 10 Si afirmamos que no hemos pecado, lo hacemos pasar por mentiroso y su palabra no habita en nosotros.

1 Juan 1:8-10

Todos hemos pecado ante el Señor y necesitamos su Gracia. Ya conociendo a Cristo también le hemos fallado, nuestras acciones han ofendido a Dios, pero podemos acudir ante Él, humillandonos y pidiéndole perdón y Dios que es fiel justo nos limpia de toda maldad. Necesitamos confesar el pecado, es necesario que seamos sinceros.

20 El Dios que da la paz levantó de entre los muertos al gran Pastor de las ovejas, a nuestro Señor Jesús, por la sangre del pacto eterno. 21 Que él los capacite en todo lo bueno para hacer su voluntad. Y que, por medio de Jesucristo, Dios cumpla en nosotros lo que le agrada. A él sea la gloria por los siglos de los siglos. Amén.

Hebreos 13:20-21

Dios que da la paz nos ayuda estimado hermano y hermana para hacer lo que le agrada, se que a veces puede ser difícil pero tenemos su ayuda, su compañía, su consuelo. ¡Qué alegría!Tenemos al gran pastor de nuestro lado a través de su Santo Espíritu.

Dios le bendiga

Mi Día con DiosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora