El humillarnos ante Dios es lo mejor que podemos hacer. Muchas veces caemos en el error de creer que no necesitamos a Dios y permitimos que nuestro ego se exalte. Eso me hace recordar a el enemigo, quien se rebeló contra Dios, y la consecuencia fue ser echado del cielo y un día será condenado por la eternidad (Isaías 14:12-14 y Ezequiel 28:12-18).
si mi pueblo, que lleva mi nombre, se humilla y ora, y me busca y abandona su mala conducta, yo lo escucharé desde el cielo, perdonaré su pecado y restauraré su tierra.
2 Crónicas 7:14 NVI
El orgullo es uno de los grandes problemas con los que luchamos, deseamos ser superiores a los demás, inconscientemente o conscientes queremos ocupar el lugar de Dios, controlar todo. No nos gusta ser siervos, queremos ser patrones y jefes, pero Dios se encarga de esa situación y muestra su poder, y nos hace comprender que solo Dios merece ser glorificado y exaltado.
Al orgullo le sigue la destrucción;
a la altanería, el fracaso.
Proverbios 16:18
Dios ofrece escucharnos, nos ofrece su perdón, y también restaurar nuestra tierra (vida), la clave es humillarnos, reconocer que solo Él es Dios. Debemos buscarlo en oración y abandonar las malas acciones. Tenemos que quitar de nuestra vida los ídolos que hemos puesto en el trono que solo le pertenece a Dios, ese ídolo puede ser el orgullo, vanidad, arrogancia, el exceso de trabajo, estudio, una persona, todo eso que nos aleja de Dios.
Muchas veces cuando estamos alejados de Dios, por orgullo comemos comida de cerdo, sabemos que tenemos un Padre que nos ama y nos espera con los brazos abiertos, ¿Qué debemos hacer? —volver a casa, eso implica que vamos a humillarnos. Nuestro Padre nos abraza y perdona, pero más que eso nos da un nuevo vestuario, un anillo y hace una celebración(Lucas 15:14-24).
Los mejores momentos que podemos vivir es cuando caminamos con Jesús, obedecemos sus palabras, se que no todo sale como esperamos; hay dificultades, problemas, enfermedades, pero Dios nos ayuda y está con nosotros.
Dios le bendiga.
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Mi Día con Dios
SpiritualFuimos escogidos por Dios antes de nacer, y aunque nosotros le fallamos, Él siempre nos ama y nos recibe con los brazos extendidos. Ser cristiano va más allá de ir a una iglesia o cumplir con un conjunto de normas religiosas. Me gustaría invitarte...
