Perfectamente Imperfectos || AITEDA

Capítulo 28

Los días pasaban y Luis no conseguía olvidarse de beso con Aitana, no habían hablado entre ellos desde entonces.

El gallego soñaba con aquel día todas las noches, y las ganas de llamarla crecían sin parar, pero no lo hacía, tenia miedo de que le dijera aquel beso fue un error, que no tendría que haber pasado.

Sin embargo, una de esas noches el teléfono de Luis comenzó a sonar, este lo cogió sin mirar quien era y contesto ordenando las hojas que tenía por la cama llena de letras.

—Luis —Comenzó a hablar dejando a este mudo

—Luis? Estas ahí? —Preguntó al no escuchar ninguna respuesta por parte de él

—Si, si, perdón, dime Aitana, que ocurre?

—Tenemos que hablar, quedamos abajo del puente donde siempre nos veíamos?

—Si, en diez minutos estoy ahí

La catalana asiente aun sabiendo que no puede verle y cuelga. Suelta un gran suspiro y mira a su perra correr tras el palo que su dueña el acaba de tirar.

Díez minutos después, aparecía Luís por el puente nervioso, Aitana ya estaba ahí jugando con Sopa mientras se reía sin saber qué detrás suyo estaba el chico que tanto ama.

—Aitana

Esta da media vuelta sonríendo y le mira haciendo que su sonrisa desaparezca, le pone la correa a Sopa y se acerca a Luis.

Es de noche, y solo estaban alumbrados por la luz de las calles, a penas se les podía ver, era un lugar seguro donde era imposible que les vieran juntos.

Se miraron a los ojos, Luis sabía que si seguían mirándose iba a acabar besandole, y no quería complicar más las cosas.

—Luis, sabes que lo nuestro no puede ser, tengo pareja y el beso me encantó y lo volvería a repetir pero no sé puede.

La escucho hasta el final y tal como acabo de hablar, este la cogió de las mejillas y le beso transmitiendole a ella que todavía la sigue amando y ese sentimiento si no se ha ido ya, ya no se irá.

¡¡AQUÍ OTRO CAPÍTULO!!