LOS SECRETOS DE AVALÓN - G!P

C: 102 - DOLOR DE MELLIZOS

Hogwarts-

-Apenas Hermione, Harry, Emily y Draco llegaron a la oficina de Regulus Black, los cuatro se sorprendieron de ver a Cassandra, a Astrea, a Dumbledore y a Lily, junto al hombre de ojos grises-

Harry: ¡Mamá! -expresó, y sin más, corrió para abrazarla-

-Lily envolvió en un cálido abrazo a su azabache favorito en toda su vida, y Cassandra sonrió enternecida al ver el lado maternal de la mujer que amaba, pero al mismo tiempo suspiró, sabiendo que sus hijos estaban con él abusador y mal hombre de su padre-

Hermione: ¿Cómo siguen? -preguntó al acercarse a ambas rubias y darles un pequeño abrazo-

Cassandra: Sigo asimilando que mis pequeños están con ese monstruo. -suspiró con tristeza-

Astrea: Al menos sabemos que están con bien. -suspiró-

Emily: ¿Cómo lo sabes, Astrea? -la miró con preocupación-

Astrea: Oh, créeme. Lamentablemente conozco bien a Eros, si ya hubiera hecho algo con los mellizos, ya nos hubiéramos enterado. -las miró-

Harry: No es por ser desesperado, pero, ¿qué hacemos aquí? -miró a todos los adultos-

Dumbledore: Oh, Harry, deberían tomar asiento. La razón por la que están aquí, es para darles una misión fuera de la vista de Eros. -lo miró con la seriedad que el hombre nunca había mostrado-

Draco: ¿Fuera de la vista de Eros? -lo miró confundido-

Regulus: Eros esperara a que el equipo de adultos de la Orden, u otra organización, intenté llegar a él y rescatar a los mellizos. -explicó, mientras los cuatro jóvenes se sentaban en unos altos bancos cerca de la pared de aquella oficina-

Cassandra: Créanme, lo que menos quisiera es que cuatro personas importantes en la vida de mis hijos, tengan que literalmente entregarse a ese horrible ser, pero Astrea es...

Astrea: Soy una abuela preocupada por sus nietos. -expresó en un suspiro-

-los cuatro jóvenes asintieron, mirando con curiosidad a aquellas rubias-

Regulus: Lo que Cassandra trata de decir, es que esta preocupada también por la seguridad de ustedes. -los miró- Es una misión muy riesgosa.

Hermione: Estoy dispuesta a afrontar cualquier situación, si con eso recupero a Apollo. -expresó con firmeza-

Emily: Y yo con Atlanta.

Cassandra: Y es por eso que son la mejor opción.

Regulus: Ahora, por favor, escuchemos a Astrea. -miró a los cuatro jóvenes-

-quienes solo asintieron, prestando atención a la mayor de los adultos. Astrea Avalón suspiró, sacando de su bolso de cuencas azules, un libro mediano de lectura ligera, de pasta delgada y roja.

La primer curiosa fue Hermione, quien sin quitarle un ojo a aquel libro, preguntó sin problemas-

Hermione: ¿Qué libro es?

Astrea: Esto, jovencitos, es el legado familiar. Mí legado familiar. -los miró- Antes de casarme con mi Apolo, antes de portar el apellido Avalón, fui Astrea Indovinare.

Emily: ¿En serio? -frunció el ceño-

Astrea: En serio.

Emily: Supongo que agradeció de más al haberse casado con su esposo Apolo. -comentó inocente-