59. Cada Vez Mejor

66 5 0
                                    

- Jaeth tan solo pasaron dos meses y ya decidiste mudarte, dije que podrías quedarte.

- oye en una relación se convive.

- pero apenas tienes 20.

- creo que es edad suficiente.

- Jaeth sólo avisame si tienes problemas e iré a rescatarte.

- Gracias Piethro.

Santiago entra e interrumpe el abrazo con mi primo. Parece que es el más indicado en interrumpe momentos familiares.

- Jaeth ¿tienes todo listo?

- Si Santi, sólo déjame despedirme.

- Jaeth - se acerca Lila con los brazos abiertos. - me apena tanto que te vayas pero sé que estarás muy bien y más si estas con Santiago.

- Gracias - respondemos Santiago y yo.

Al terminar de despedirnos, colocamos las cosas en la camioneta y le doy una última mirada a la casa de mi primo y mi familia. No puedo creer que vaya a vivir con mi novio, estoy algo nerviosa. ¡Alto! Dormiremos en cuartos separados ¿verdad?.

...

- Listo Jaeth, dejemos las cosas aquí por ahora y mañana comenzamos con los arreglos ¿te parece?

- Si, esta bien.

- por cierto ¿tienes hambre? ¿quieres cereal?

- me encanta que conozcas tan bien mis gustos. Si por favor.

- sale en seguida.

Comienzo a recorrer la casa de Santiago, es magnífica. Si que tiene muchos libros y hay un cuarto que me llama la atención pero esta cerrado, de todos los cuartos es el único que tiene llave.

- Jaeth

- voy. - me apresuró para llegar al comedor, ¿Por qué su casa es tan grande si vive solo? - lo siento Santi, quería recorrer un poco.

- Está bien, después de todo esta también es tú casa ahora. Por cierto cociné sopa también, no creo que el yogurt sea suficiente.

- ¿sabes cocinar?

- pues vivo solo, ¿no pensaras que iba a comer todos los días fuera o si?

Ghg. Me alegra y sobresalta lo que acabo de escuchar. Pienso que el que Santiago cocine es algo súper útil, porque yo odio cocinar, pero recuerdo que cierto chico también dijo esa misma frase. ¿que será de él?. En fin, no sirve llorar por leche derramada.

- Eres fantástico Santiago.

- Ven vamos a cenar.

- Si muero de hambre.

NO DIGAS ADIÓSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora