XXXII

750 72 16
                                    

Tercera persona

Era el cumpleaños de Ana, y no podía imaginar una mejor manera de celebrarlo que una noche apasionada con su casi algo, Jana. Llevaban saliendo un tiempo, pero era la primera vez que eran íntimas, lo que lo hacía una noche para recordar.

Mientras yacían en la cama, sus labios se unieron en un profundo beso y las manos de Ana recorrieron el cuerpo de Jana. Amaba la sensación de su piel suave y la forma en que el cuerpo de Jana respondía a su toque. La curiosidad y el deseo de Ana por complacer a la chica que tenia debajo eran igualmente intensos.

Al principio, Ana tenía el control, sus manos guiaban el ritmo mientras exploraba el cuerpo de Jana. Besaba su cuello, mordiendo y chupando zonas sensibles, haciendo que Jana se retorciera y gimiera. Con dedos hábiles, Ana desabrochó el sujetador de Jana, liberando sus pechos, llenos y perfectos en las palmas de Ana mientras los masajeaba y apretaba. Tomó un pezón en su boca, rodeándolo con la lengua antes de succionar suavemente, luego con más firmeza, mientras Jana arqueaba la espalda y gemía en voz alta.

El toque de Ana era seguro y sensual, y Jana no podía tener suficiente. Pero a medida que el placer aumentaba, el deseo de Jana de tomar el control y darle a Ana la noche de su vida se volvía más fuerte. Con una sonrisa juguetona, Jana empujó suavemente a Ana sobre su espalda y se montó en su cintura.

-Es tu cumpleaños-susurró Jana, su aliento caliente contra el oído de Ana.-Esta noche quiero complacerte, déjame mostrarte cuánto quiero hacerte sentir bien.

Las palabras de Jana enviaron un escalofrío por el cuerpo de Ana. Ser sumisa era una nueva sensación para ella, y la idea de que Jana tomara la iniciativa encendió un fuego en su interior. Asintió, sus ojos llenos de anticipación y deseo.

Jana se inclinó, capturando los labios de Ana en un beso hambriento, sus manos recorriendo el cuerpo de Ana. Podía sentir la respiración de Ana acelerarse mientras besaba y mordisqueaba su cuello, dejando marcas de amor que le recordarían a Ana esta noche durante días.

Las manos de Jana encontraron el borde de la camiseta de Ana y la levantaron sobre su cabeza, rompiendo el beso solo brevemente. Admiró los hermosos pechos de Ana, acariciándolos y masajeándolos suavemente antes de tomar un pezón en su boca, jugando con el con su lengua y dientes. Mientras chupaba, deslizó su mano por el estómago de Ana, sus dedos encontraron el botón de sus pantalones. Con movimientos lentos y deliberados, los desabrochó y desabotonó, deslizando su mano adentro.

Ana levantó las caderas, permitiendo que Jana le quitara los pantalones y la ropa interior. Los pateó, ahora completamente desnuda y a merced de las manos y boca exploradoras de Jana. Los dedos de Jana recorrieron la hendidura de Ana, provocando suavemente, antes de introducirse, encontrándola cálida y húmeda.

-¿Te gusta?- Murmuró Jana, su aliento caliente contra el oído de Ana y ella simplemente respondió con un pequeño gemido.

Con eso, Jana comenzó a bajar y se posicionó entre los muslos de Ana y la miró a los ojos, una mezcla de deseo e inocencia brillando en su mirada. Lentamente, bajó la cabeza, su lengua extendiéndose para lamer el clítoris hinchado de Ana. Ana gimió, sus caderas se elevaron cuando sintió la lengua de Jana provocarla y rodear su punto más sensible. Los dedos de Jana encontraron su camino dentro de Ana nuevamente, moviéndose dentro y fuera en un ritmo lento y constante.

Mientras Jana hacía a Ana estremecerse, miraba hacia arriba encontrándose con su mirada, observando cómo su rostro se contorsionaba de placer. Le encantaba la forma en que el cuerpo de Ana respondía a su toque, cómo sus caderas se levantaban de la cama mientras se retorcía de éxtasis. La lengua de Jana se movía y giraba, sus labios chupaban suavemente y luego mordisqueaban.

𝐍𝐎𝐓 𝐄𝐍𝐎𝐔𝐆𝐇-𝐉𝐚𝐧𝐚 𝐅𝐞𝐫𝐧á𝐧𝐝𝐞𝐳Donde viven las historias. Descúbrelo ahora