Sentía dolor, bastante dolor como para sacarme de la realidad. Lo único que recibía mi cerebro eran señales de dolor.
Sheld me tomó de la cintura con cuidado de no tocar cerca de la herida; se inclinó para tomar mis pies y alzarme en sus brazos. Realmente me sorprendía su fuerza.
Me llevó cargando hasta la enfermería. Supongo que pronto todos estarán hablando de mi y de Sheld, es algo que les encanta hacer: hablar. Las princesas adoran el cotilleo y los príncipes las burlas. Un mucho inmaduros diría yo.
Pero no era tiempo de lamentarse por futuros chismorreos. Tenía que hacerme revisar urgentemente la herida que, aunque las garras de Sheld no son muy grandes, si que son afiladas.
Aún algo de sueño y la inquietud de la discusión me mantenían consiente y evitaban que gritara del dolor.
Evie iba delante nuestro guiando a Sheld hasta la enfermería. Podía notarse que ella estaba más angustiada que yo; caminaba sumamente rápido y sin equilibrio, volteaba constantemente para cerciorarse de que aún no moría.
En cambio Sheld era difícil de descifrar. Su rostro lo mostraba calmado, más serio que de costumbre, pero podía casi asegurar que internamente estaba derrumbándose por la culpa que bien merecida tenía.
No podía negar el cierto odio que tenía hacia el pero de igual forma me excusaba de que había sido un accidente. Aún así, estaba enojado... Mucho. Sólo esperaba no explotar en público.
Finalmente llegamos a la enfermería. Detestaba como el camino se había alargado. Tuve que morderme la lengua para no soltar un chillido en más de una ocasión.
El chico gato me depositó sobre la camilla blanca una vez que entramos.
La enfermera en turno, una joven hada aspirante, se levantó de un brinco cuando todos entramos de repente a la siempre tan tranquila sala pintada de blanco que fungía como enfermería.
-¿Qué ha sucedido? -preguntaba la confundida enfermera.
-¡Mi amigo!... ¡Sa-sangre!... ¡S-su brazo! -tartamudeaba Evie en un intento fallido de explicación.
El hada-enfermera volteó a examinarme de arriba a abajo y abrio los ojos como platos al ver la herida en mi brazo ya teñido de un rojo coagulado.
Se apresuró a examinar la herida y proceder con su curación.
"Por suerte no ha sido profunda" dijo la joven examinando los tres horificios en la piel y los rasguños que los acompañaban.-Sanará en unos cuantos dias -señaló después de haber lavado la herida y puesto alcohol, ungüentos naturales y vendas sobre ella.
La chica terminaba de ajustar las vendas y poner los seguros. Evie y Sheld ya se habían relajado también y ahora esperaban sentados a que terminara.
-Debo preguntar ¿cómo te lo has hecho? -sentencio la enfermera sin apartar los ojos de las vendas.
Sheld se removió incómodo en su lugar por la pregunta. Es obvio que la respuesta le causaba la angustia.
El chico-gato abrió la boca para confesar pero me ha dado algo de lástima y le interrumpí antes de que hablara.
-Se me ha roto un espejo encima y me clavé algunos pedazos -mentí, aunque en realidad si había roto un espejo hace no mucho. Espero que Evie ya no lo recuerde.
-Hmm... Bien pues ten más cuidado, chico -concluyó la mayor levantándose y dando por terminada su labor-. Cualquier problema que surja ven de inmediato.
Sonreí como respuesta. Era una mujer agradable, hacía tiempo que no conocía a nadie así. Se notaba que disfrutaba de ayudar a la gente y extrañamente, esa emoción se me contagiaba, más al ver su sonrisa sincera. Creo que su bondad me alivianó un poco el ánimo pues cuando salimos de ahí no quería asesinar a mi novio... Al menos no aún.
Atravesamos la puerta e íbamos de regreso a mi habitación. Por recomendación de la mujer, debía permanecer al menos unos días en reposo y mover lo menos posible el brazo. Algo de relajación me vendría bien en estos instantes.
Mis pensamientos estaban en las nubes pero me trajo de inmediato a la realidad el sentir como Sheld me tomaba de la cintura con una mano y caminaba a mi lado.
Suavemente se acercó y me dio un beso en la mejilla, rápido pero tierno.
-Por favor perdoname -dijo en seguida con sus labios junto a mi oído.
No le contesté, primeramente porque no sabía si debía, ¿que se hacía en esos casos? ¿Que si mi novio se pelea con mi amigo cuando llevamos un día y por accidente me hiere con sus garras de gato? Una pregunta difícil.
Segundo, aún no quería desahogarme. Estaba evitando el ofuscarme, contenerme, respirar hasta diez y dejar los insultos para otro momento. Debía guardar la calma, más con mi reciente novio.
Entramos a mi habitación y lo primero que hice fue recostarme en la cama. Los dos que me acompañaban entraron también pero lucían un tanto perdidos, o más bien desubicado después del ajetreo.
Evie se había quedado solo para averiguar qué sucedió y que le contara TODO lo que pasó con Sheld en mi cita, seguramente. Sheld quizás por la culpa, se le veía en la cara. Nunca antes lo había visto así, como un perrito regañado que se acuesta en un rincón. Ambos me veían.
-Pueden dejar de observarme así?
Soné más fastidiado de lo que me hubiera gustado. Esperaba que rápido todo esto pasara.
La situación se tornó incómoda muy rápidamente, esta mañana aún desperté con la ilusión de ver su rostro recostrado cerca del mio. Soñaba con que sus primeras palabras del día serían para mí pero en lugar de eso desperté con dos idiotas luchando entre sí por cosas sin sentido.
Y la peor parte es que sabía que aún no había acabado esa discusión.
•••••••••
Hola de nuevo mis queridos lectores...
Otro capítulo más. Si, lo sé, quizas les parezca que es muy simple y aburrido (y lo es) pero tengo una buena excusa: en la escuela estamos en final de semestre entonces me dejan proyectos, ensayos, trabajos, exposiciones y exámenes :'(
Además últimamente he tenido problemas con la trama. Tengo todas las ideas revueltas y necesito tiempo para reacomodarlas.
¿Por que les cuento esto? Antes que nada disculparme por no publicar tan seguido y porque quizás me ausentaré un poco más de tiempo por lo mismo de la escuela, así que les pido tengan me un poco de compasión 🙏.
Espero pronto poder retomar la escritura, sólo esperen unas dos semanas más o menos ya que pase todo lo del semestre y reacomode la trama.
Si leyeron todo esto, gracias
Y nos leemos en otro capitulo, pronto 😉...
D.
![](https://img.wattpad.com/cover/46172608-288-k155667.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Pieles y coronas
FanfictionLa vida de Carlos nunca ha sido un cuento de hadas. Ahora tiene una nueva oportunidad para rehacerla fuera de la isla. Ser bueno, es la parte difícil. El mundo es muy distinto aquí y si creías que los villanos eran malos, deberías conocer a la reale...