~Narrado por Brian~
Sólo hasta que me sentí un poco más tranquilo fue que me levanté y me dirigí a casa. Estaba demasiado mal con todo lo que había pasado con Stefani. Bueno, es que yo sabía que ella no quería verme, así que no era toda su culpa, también era mía por faltar a mi promesa de no molestarla más. Debí hacerle caso a Fred cuando me dijo que no le dirigiera la palabra, nos habría ahorrado un rato incómodo a todos.
Ah, y también me sentía un poco culpable por haber tratado a Hazel como lo hice, pero quería estar sólo, y todo lo que le dije simplemente se me salió, aunque la verdad si me tenía muy consternado su manía de querer estar siempre conmigo. Da igual, eso puedo arreglarlo después.
Por ahora, estoy tratando de convencerme a mí mismo de que es totalmente inútil pensar siquiera en que lo mío con Stefani pueda volver a funcionar. Necesito aceptar su decisión, hacerme a la idea de que ella está feliz con Roger, y no tengo porque arruinarle eso.
Había pasado tanto tiempo en aquel feo callejón, que llegué a casa cuando estaba a punto de anochecer. Papá seguía en el taller, así que me dirigí ahí.
-Hola papá-saludé, sin mucho ánimo
-Bri, no te esperaba tan tarde, a decir verdad-se sorprendió mi padre, pero se veía feliz-¿La pasaste bien?
Estuve a punto de responder que no, pero si lo decía tendría que explicar todo y...
-Sí, estuvo bien-mentí-Sólo anduvimos por ahí, fuimos a comer... nada especial
-Deberías animarte a salir más seguido, te hará bien distraerte lo más que puedas
-Supongo que sí. Bueno, ¿te ayudo en algo, papá?
-No, ya todo lo de hoy está listo
-Lamento no haberte ayudado hoy
-Descuida, prefiero que no estés aquí encerrado
-Sí pero...-sonreí un poquito-Bueno, a tu edad...
Él soltó una risita y me dio un pequeño golpe en la nuca.
-Pues ya que insistes, vas a barrer todo el aserrín del taller, ¿qué te parece?
-¿Demasiado para un anciano?
Papá tiró levemente de un mechón de mi pelo, pero luego revolvió mis rizos.
-Rápido, a ver si barres tan bien como hablas
-Ve a descansar, papá
Mi padre entró a la casa, al tiempo que yo tomaba una escoba del rincón, y empezaba a limpiar el piso. Estaba demasiado distraído, mis movimientos eran casi mecánicos, pues mi mente estaba ocupada en recordar cada detalle de lo que Stefani me había dicho.
Barrí todo el aserrín que había juntado hacía una esquina, y cuando me volví a tomar un recogedor, recibí un fuerte empujón en los hombros.
-¡Oye!-exclamé, al reconocer la figura
-¡Eres un imbécil!-me espetó Freddie, empujándome contra la pared
-¡Cálmate! ¿Yo qué hice? ¿No te equivocaste y más bien ibas a reclamarle a Roger?
-Creo que te esforzaste por quitarle el puesto de patán
-¿De qué demonios hablas?
-¡¿De qué va a ser?! ¡Hazel!
-¿Qué pasa con ella?
-¡Ay, eres un idiota!
Fred volvió a empujarme. Para su tamaño, admito que tenía mucha fuerza.
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Yoü And I
RomanceBrian May es un chico humilde y tímido, con grandes aspiraciones para su futuro. Stefani Germanotta es una rebelde nata cuyo sueño es ser cantante. Cuando ambos se conocen, saben que están dispuestos a estar juntos para siempre, pero ¿y si parece qu...