~Narrado por Brian~
Luego de un rato, estábamos en una cafetería. Hazel seguía un poco seria conmigo, pero ahora era yo quien se esforzaba por entablar una conversación. Supongo que así se sentía ella desde hacía mucho tiempo, y esto sólo lograba hacerme sentir más idiota, ¿cómo fui tan descortés con ella?
Bueno, en fin, había momentos en los que ella se reía de las estupideces que estaba diciendo para hacerla reír, pero luego parecía recordar que, como había dicho Freddie, ella quería renunciar a buscar algo conmigo.
-Oye-le dije, cuando estábamos por entrar a la cafetería-Necesito saber si... si todo está bien... ya sabes, entre nosotros
-Ya te dije que sí-respondió Haz, con una tímida sonrisa
-¿Segura?
Ella puso los ojos en blanco, asintió y me tomó de la muñeca para hacerme entrar. Nos sentamos en una mesa para dos, y le pedimos a la mesera un par de malteadas.
-Hazel...
Clavó sus lindos ojos cafés en mí. Joder, realmente necesitaba a esta chica en mi vida...
-De verdad lo siento-repetí, por enésima vez
-Mira, si vuelves a decir eso, te voy a golpear, ¿captas?
-No era necesaria tanta agresividad
-Parece que sí
Sonreí. Ella me hacía sentir muy cómodo, es como si pudiera decirle cualquier cosa, y a ella no iba a parecerle mal...
-Bueno... y a todo esto-dijo Haz, acomodándose un mechón tras la oreja-¿Cómo te sientes?
-¿Sobre qué?-pregunté
-Sobre cómo te trató Stefani
Solté un gruñido. Vaya, ni siquiera había pensado en eso.
-La verdad es que ya no me importa-respondí-Bueno... Supongo que estuvo bien que me dijera lo que me dijo
-No estuvo nada bien, te insultó muy feo
-Sí, pero al menos ya tengo total certeza de que es completamente estúpido desperdiciar tiempo pensando en ella, así que... bueno
-Sí, por ese lado está bien. Ya era justo que lo notaras, ¿sabes?
-Podías habérmelo dicho
-Lo hice, y me ignoraste
-Pudiste haber insistido
-No me provoques
La señorita nos llevó las malteadas. Le di las gracias, mientras Haz tomaba un poco de espuma con el dedo y se la llevaba a los labios. No puede evitar sonreír. Ella lo notó y dijo:
-¿Qué?
-Nada-respondí, mirando a otro lado-¿Tu amiga no te reclamó por salir conmigo y los chicos?
-No se enteró, ves que me quedé atrás con John, así que supongo que no me vio. Y es una suerte, porque casi podía escuchar cómo me reprochaba frecuentarme con ustedes-dio un sorbo a su malteada antes de continuar-Aunque creo que no habría sido tan grave. Ya no soporto escucharla hablar de Roger.
-Debe pasarla bien con él
-Créeme, se la pasan peleados, o enojados, pero al día siguiente de una pelea ella aparece hablando de lo maravilloso que es y... ¡Ah, no sé! Odio que sea así
-Sólo haces que me den ganas de ir a su casa a romper los vidrios con piedras...
-¡Vaya, eso suena tan maduro! Y para nada de ex novio celoso, eh...
-Ah no, nada de celos, por mí que se ahogue en su felicidad con ese sujeto
Hazel se quedó callada unos momentos, mirándome. Soltó una risita y comentó:
-¿Te mencioné lo acabado que luces hoy?
-Mmm... Bueno, no, pero sé que lo piensas siempre que nos vemos
-Quizás. Deberías esforzarte un poco por seguir las instrucciones de la doctora, no has mejorado nada...
-Lo haré, lo prometo... Bueno, es que no le veía caso...
-Pero nosotros sí, así que...
-Sí, claro, como ordene, jefa
Haz soltó una risita. En eso, un grupito de chicas pasó junto a nuestra mesa, y pude notar que nos miraban atentamente.
-Es Stacy Ferguson-murmuró Hazel
Miré hacia allá. Las chicas, unas 5 o 6, se acomodaban en una mesa.
-¿Cuál de todas?-pregunté, antes de llevarme el vaso a los labios
-Obvio, la que tiene la pinta de ser la perra mayor
Me atragante con el trago de malteada que tenía en la boca.
-Pues es la verdad-dijo Haz, entre risas, dándome unas palmaditas en la espalda-Quiere salir contigo desde que andabas con... Ya sabes. No porque le gustes en serio, solo que "tú-sabes-quién" le cae súper mal, y le gustaría hacerla sufrir
-Eso no está mal-dije, tosiendo- Podrías presentármela
Hazel me dio una patada en la pierna, debajo de la mesa.
-¡Auch!-exclamé-Es broma, tranquila
-No juegues con esto, tonto. Ya me imagino: tú, saliendo con la más zorra...
-Estúpida escuela y sus enemistades entre grupitos
-No me digas que no tenías enemigos en la escuela
-Algo así, más bien yo era el nerd al que golpeaban y obligaban a hacer la tarea de todo el mundo
-¿En serio?
-Sí, tengo las cicatrices, ¿Quieres ver?
-No, gracias... ¿En serio eras tú al que hacían bullying?
-¿Te sorprende?
-Pues sí, eres muy alto, nadie golpea a los grandotes, ni a los guapos...
-¿Crees que soy guapo?
Hazel se sonrojó y no respondió. Sonreí un poco y dije:
-Siempre he sido igual de imbécil, por eso es tan fácil abusar de mí
-Oh vamos...
-Te lo juro
-Bueno y... ¿Vas a volver a la uni este semestre?
-No creo, apenas completo para la matrícula, no se diga los exámenes de reingreso y esas cosas
-¿Cuántos semestres te estarías saltando?
-Si me salto este... cuatro
-¿Y seguirás trabajando mientras?
-No sé... He estado pensando en alistarme al ejército
-¿Bromeas?
-Claro que no
-Vamos Bri, ni te dejarían entrar así como estás
-Por eso creo que voy a tomarme en serio eso de recuperarme
-No te dejaré hacerlo
-¿Recuperarme?
-Alistarte, tarado
-¿Por qué no?
-Eres tú... Tú no perteneces al ejército, vaya idea estúpida, ¿Cuándo se te ocurrió?
-De esas veces que no puedes dormir y piensas cualquier cosa... Sólo es una posibilidad, aún no lo decido
-No lo decidas
Haz se veía preocupada de verdad, así que decidí no volver a tocar el tema. Puse mi mano sobre la suya y dije:
-Cálmate, aún no lo sé
-Bueno... Es que no... ¿Y si te pasa algo?
-Por ahora solo preocúpate porque me pase algo por lo desnutrido que estoy
-Bien...
Pude notar que se había puesto un poco nerviosa cuando toqué su mano. Hablando de ideas locas que se te ocurren durante la noche... Había tenido una, que creo que era hora de llevar a cabo:
-Hablemos de algo más... ¿Qué tal tu vida amorosa?
Haz soltó una risa fingida y respondió:
-Peor que la tuya, creo
-Auch... Pero lo mío es comprensible, es decir, ¡solo mírame!
Haz miró a otro lado y negó con la cabeza, distraídamente. Me acerqué a ella, arrastrando la silla, y completé:
-Pero tú... tú eres muy bonita
Ella me miró de nuevo, desconcertada. Sonreí, sin apartar mis ojos de los suyos. Haz se sonrojó, para variar, dibujó una pequeña sonrisa y me apartó el fleco de la frente.
-Lindos ojos-murmuró, mirándome directamente a ellos
-Lo mismo digo
No pude evitar ver de reojo que Stacy Ferguson y compañía no nos quitaban la vista de encima.
-Tus amigas nos miran-susurré
-Son unas tontas-respondió, restándole importancia
-Míralas... Dime que cara pone Stacy luego de esto
-¿De qué?
-Esto
Me incliné y le di un beso a Hazel junto a los labios. Ella enrojeció de inmediato, incrédula. Sonreí un poco más. Y me di cuenta de que yo jamás sonreía de verdad... Salvo estando con Haz.
-¿Qué fue eso?-preguntó Hazel, aún muy sonrojada.
-Perdón-dije, bajando la vista, temiendo que todo me hubiera salido mal
-No, no... fue lindo
-¿Sí?
-Sí
Hazel me abrazó. Yo sentía algo que hacía mucho tiempo no sentía... le devolví el abrazo, respirando hondo. Duramos así varios segundos, pero de pronto, ella me soltó.
-No llegará a más, ¿verdad?-preguntó
No respondí de inmediato. De hecho, no tenía ni idea de cómo se podía responder a eso.
-No te estoy obligando a nada-sonrió ella, sin mirarme directamente a los ojos-Ambos sabemos que si lo intentaras, no funcionaría, porque no me amarías como a ella
Esto me hizo recordar esa frase, la que le dije más de una vez... "Preferiría morir antes que estar con otra que no seas tú". No me di cuenta hasta este momento, pero si yo tratara de llegar a algo más con Hazel... nunca sería igual. Me la pasaría pensando en las diferencias entre Hazel y... bueno, la otra. Nunca estaría a gusto con nadie, y casi podía decir que tenía derecho a odiarla por eso. No sólo se fue, dejándome un enorme vacío existencial, sino que también, aunque no lo quisiera, me quitó toda posibilidad de ser feliz con alguien más.
-Las chicas no andamos con el ex de nuestra mejor amiga-añadió Hazel, pero lo dijo más para ella que para mí
-Tienen demasiadas reglas-opiné, pasándome la mano por la nuca
-Tú lo has dicho
-Pero me importan un carajo sus reglas
Hazel me miró, algo sorprendida por lo que había dicho, tomó mi cara entre sus manos y, sin que me lo esperara, me dio un beso en los labios. Y me soltó antes de que pudiera reaccionar siquiera.
-Perdón-dijo, sin mirarme-Tenía que hacerlo, aunque fuera solo una vez
-Si vas a hacerlo, hazlo bien-murmuré, tomé su barbilla suavemente y la besé despacio
No sabía si estaba bien o mal, si debía parar o no, ni si eran mejores sus labios a los de "ella"... Solo sabía que Hazel estaba ahí, conmigo siempre, y nada más.
Nos separamos. Haz no levantó la vista. Se quedó mirando mis labios, incrédula.
-Ahora entiendo por qué Stefani te presumía tanto...-murmuró-Eres genial
-¿Si te has dado cuenta que te he tratado mal, no?-le hice ver, pasando mis dedos por su cabello
-Pues entonces no sé qué sea para ti "tratar bien". Y si la "tratabas bien" a ella... Es una estúpida por dejarte
Me encogí de hombros. Hazel seguía muy sonrojada, y yo no podía evitar sentirme incómodo, pero no por lo que acababa de pasar... sino porque quería que pasara de nuevo. Lo pensé varios minutos, pero al fin solté:
-Hazel, quiero pedirte algo
-Claro, dime-respondió ella, al parecer, tan aliviada como yo de haber roto el incómodo silencio
-Quiero que seamos más que amigos
Haz se me quedó viendo como si acabara de decir una terrible maldición o algo así.
-¿Qué estás diciendo?-preguntó, asustada
-Quiero que seas... Mmm... no sé cómo decirlo. Quiero poder abrazarte y besarte, si tú estás de acuerdo, pero no quiero que seas mi novia, y no porque no me gustes, sino porque no funcionaría tan bien como yo quisiera
Dije todo aquello muy rápido, y me puse cada vez más nervioso.
-¿Quieres que seamos amigos con derechos?-sugirió ella
-¡Sí! Eso es lo que quiero
-Brian...
-Sólo es una sugerencia
Agaché la mirada y puse ambas manos sobre mi cabeza. Sí, la había hecho, había dicho una total ridiculez. Es decir, sé que le gusto a Haz, ¿esto era lo único que se merecía de mí?
Haz tomó mis dos manos con delicadeza. Yo la miré. Ella parecía estar conteniendo las ganas de gritar de la emoción. Demonios, definitivamente, esta chica es fantástica.
-Está bien-dijo, con una gran sonrisa
-¿Ah sí?
-Sí
Hazel tomó mi cara entre sus manos y me besó profundamente, como hacía casi tres meses que no me daban un beso. Duramos muchísimo así unidos por los labios.
Cuando al fin nos separamos, susurré:
-Dame algo de tiempo... quizás podamos ser novios un día
-Eso sería genial-respondió ella, y me volvió a besar.
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Yoü And I
RomanceBrian May es un chico humilde y tímido, con grandes aspiraciones para su futuro. Stefani Germanotta es una rebelde nata cuyo sueño es ser cantante. Cuando ambos se conocen, saben que están dispuestos a estar juntos para siempre, pero ¿y si parece qu...