Capítulo 35
~Narrado por Roger~
Pues sí, había sido necesario ir al hospital, porque esa última patada de Brian me había roto la nariz. Ahora tenía está completamente cubierta de gasas blancas. Normalmente, sé que podría vencer a Brian fácilmente, pero sentí que... bueno, que lo menos que podía hacer es dejar que me golpeara un poco. Me estaba sintiendo muy mal, pero nada que ver con los golpes, más bien, porque Bri no quería escuchar mis disculpas. Es normal, la verdad. Lo que sí no me esperaba era que él supiera lo que pasó con Stefani. Realmente agradezco que sólo me rompió la nariz. Por su aspecto ese día al mirarme, cualquiera estaría seguro de que era capaz de matarme. Él mismo lo dijo, y de verdad me siento afortunado de seguir entero.
-Roger, ¿qué te pasó?-preguntó mamá de inmediato, cuando llegué al comedor, se levantó y fue hacía mí
-Tranquila, estoy bien-aseguré-Me chocaron, y me golpeé en el volante-mentí rápidamente
-¿Qué te dijo el médico?
-Nada, que en unos días estaré bien... sólo me duele un poco
Me senté en mi sitio, y una de las sirvientas me puso mi plato enfrente.
-¿Cómo vas con la hija de Joseph?-quiso saber mi papá
-Yo... no la he visto-respondí, mirando mi plato
-¿Y qué esperas para ir?
Suspiré y me aclaré la garganta, antes de decir:
-Papá... no sé si esto es buena idea
Mis padres se volvieron a mirarme, muy sorprendidos. Yo no me atreví a quitar los ojos de la mesa.
-¿Qué estás diciendo?-me retó papá
-Es que... Es obvio que Stefani no quiera ni verme... Ve lo que le hice...
-Y Joseph fue muy amable al no meterte en la cárcel. Lo menos que puedes hacer es devolver el favor haciendo que Stefani se vuelva a enamorar de ti
- Ya sé que esperan eso de mí, pero... pero yo ya no sé si quiera seguir con esto
-¿Qué tonterías estás diciendo Roger? Muy bien sabes que es tu obligación
-Pero...
-¡Sin peros! Mañana mismo vas a ir a casa de Stefani, y no sé cómo le vas hacer, pero vas a volver a conquistarla ¿entendiste?
-Sí, señor...~Narrado por Brian~
Ese fin de semana, me la había pasado como en las nubes... no sé porque no le había pedido a Haz que fuera mi novia antes... es decir, ya nos veíamos, estábamos juntos siempre y sabíamos lo que sentíamos... Pero ahora que al fin era oficial... Vaya, era hermoso... saber que ella era mi chica... bueno, me sentía feliz, como no lo había sido en meses.
Era algo muy distinto a como había sido con Stefani, Haz era demasiado tierna conmigo, al mismo tiempo que era mala. Me encantaba nuestra nueva relación. Incluso ya me había presentado a sus padres. He ahí otra gran diferencia: los padres de Haz me dieron su aprobación de inmediato, me invitaron a cenar y creo que les había caído bastante bien a todos... excepto a Ronnie, el hermanito de 6 años de Haz, que no había dejado de mirarme con el ceño fruncido y había declarado más de una vez que él no dejaba que su hermana tuviera novio. Era muy gracioso, en realidad. Estoy seguro de que a Ronnie le encantaría pegarme una patada.
Pero en fin, llevábamos sólo un par de días saliendo, y me sentía muy cómodo con todo. Freddie había sido una parte muy importante de este plan, por eso ahora me dirigía a su casa, con una pequeña caja de cartón en las manos.
Toqué a su puerta, y Fred apareció casi de inmediato, con un par de gatos junto a sus pies, uno en los brazos y otro en su cabeza, como un sombrero.
-Vaya... sabía que te gustan los gatos... pero esto es ridículo-comenté
-Hola Bri, que gusto verte, ¿tus orejas crecieron más?
-Ja ja... ¿puedo pasar?
-Adelante
Cuando pasé por su lado, el gato que llevaba en brazos me bufó y trató de arañarme. Yo me sobresalté un poco.
-¡Hey!
-Lo siento Bri, a Delilah no le gustan los extraños-se disculpó Fred-Siéntate
Me senté en un mullido sofá, y Fred se sentó junto a mí, dejando a Delilah en el piso.
-¿No te es incómodo tener un gato en la cabeza?
-¿A ti no te es incómodo cargar tus enormes orejas?
-¡Deja de meterte con mis orejas!
-Si no te hubieras cortado el pelo, nunca me habría dado cuenta de que tienes un par de antenas parabólicas en la cabeza
-¿Dejarás de molestarme por haberme cortarme el pelo algún día?
-Sí: cuando te vuelva a crecer
-Pues...
-Mejor cállate... bueno, no. Dime ¿cómo te fue con Haz?
-De eso venía a hablarte... pero antes de dar detalles, quisiera decirte algo
-Dime
-Bueno, quiero agradecerte por todo... te has portado increíble conmigo, eres el mejor amigo que he tenido en la vida
Freddie se emocionó y me abrazó, diciendo:
-Aww vas a hacerme llorar
-No, de verdad... No sé qué haría sin ti
-Serías un idiota... bueno, lo eres, pero al menos tienes a un amigo magnífico
-Ignoraré eso
Lo abracé también, diciéndole:
-Te traje un regalo, por haberme ayudado tanto
-¿Qué es?
Le puse la caja de cartón en las piernas. Freddie me miró, y luego centró su atención en la caja. La abrió, y soltó tal grito de emoción que hizo que el gato de su cabeza se asustara y huyera de ahí.
-¡Por dios, Brian!
-Sabía que te gustaría
Por la boca de la caja se asomó un gatito bebé, de color blanco, con un ojo azul y el otro verde. Soltó un agudo maullido. Fred ahogó un grito y lo tomo en brazos, acurrucándolo en su pecho.
-¡Me encanta Bri! ¡Muchísimas gracias! Awwww es tan... ¿es niño o niña?
-La señora que me lo dio me dijo que era niño
-¡Es tan lindo! Lo llamaré Goliat... ¡Awwww gracias Brian! ¡Ya te quiero más!
-Gracias a ti por todo
Freddie cubrió de besos a Goliat, quien se puso a ronrronear, feliz de conocer a su amo.
-Ahora sí, cuéntamelo todo-pidió Freddie, metiéndose al gatito dentro del suéter, dejando afuera solo su cabeza.
-Pues ese día me sentía súper nervioso... cuando vi lo que habías hecho en el patio casi me muero, eres un artista
-Lo sé, dear, pero dame más detalles, ¿cómo reaccionó Hazel?
-Le dije que iba a preguntarle algo, y le mostré el letrero... Y empezó a llorar
-Awwwww.... ¿qué más?
-Me dijo que creía que eso jamás iba a pasar, estaba muy emocionada...
-¿Y luego?
-Luego... bueno, luego nos besamos, y... bueno, ya
-¿No me contarás lo demás?
-No seas chismoso, es privado
-Ahh... de acuerdo
-Y ayer me invitó a cenar a su casa, con sus papas
-¿Y...?
-Creo que me aceptaron bastante bien, eso es bueno
-¡Muy bueno! No tendrás que estar escondiéndote como con... ehh...
-¿Stefani? Sí, exacto. Ya puedes decir su nombre, me importa un carajo
-Wow... creí que jamás te escucharía decir eso. Me da mucho gusto. Al fin estás con alguien que sí te merece
Sonreí un poco y asentí.
-Estoy muy contento, la verdad-dije
-Ya te hacía falta, pasaste por mucho por culpa de aquella tipa
En ese momento, recordé algo...
-Hey, hay algo que no te había dicho...
-¡Dime!-exclamó Fred, mirándome con mucha atención
-El otro día el malnacido de Roger fue a mi casa
-¡¿Qué?! ¡¿Qué demonios quería?!
-Quería "disculparse conmigo"
-¡¿Pero que mierd...?! ¡Qué hijo de puta!
-Ya lo sé...
-¿Qué hiciste tú?
-Lo lógico: lo golpeé
Freddie soltó una carcajada y me dio un golpe en el hombro.
-¡Hasta que haces bien las cosas!
-Sí bueno... Me debía muchas, así que hice lo que tenía que hacer, en especial por lo que le hizo a Stefani, porque...
Me callé. Pero ya era tarde. Fred me miraba con los ojos muy abiertos.
-¿Qué le hizo a Stefani?
-Nada, se me escapó...
-¡Dime!
-¡Nada!
-¡O me dices o...!
-¡Basta, olvídalo!
-¡Brian!
-¡Ya! El caso es que le rompí la nariz y le dije que no se me volviera a parar enfrente o lo mataba
-Mmm... Bueno, eso me parece muy bien, pero... ¿me dirás lo de Stefani?
-Jamás

ESTÁS LEYENDO
Yoü And I
RomanceBrian May es un chico humilde y tímido, con grandes aspiraciones para su futuro. Stefani Germanotta es una rebelde nata cuyo sueño es ser cantante. Cuando ambos se conocen, saben que están dispuestos a estar juntos para siempre, pero ¿y si parece qu...