Yoü And I

Capítulo 38

~Narrado por Stefani~
Me la había pasado muy deprimida los últimos días. Aunque papá no había vuelto a decir nada, era casi seguro que mi mudanza a Italia era un hecho. Mi principal razón para no querer eso era Brian. Sí, y es que a pesar de que veía imposible volver a tener algo con él, el simple hecho de verlo de vez en cuando era suficiente para mí.
Lo que realmente me tenía mal era el hecho de que él y Hazel fueran novios, sólo de pensar que era ella, mi mejor amiga, y no yo quién estaba en sus brazos, me daba una sensación de... no sé si rabia o tristeza. El caso es que me la pasaba llorando todo el tiempo que estaba sola, que esos días era bastante, a decir verdad.
-Stefani, cariño...-dijo del otro lado de la Sra. Lucciani, el ama de llaves, y mi antigua nana
-Adelante
De todas las personas que vivían en esta casa, esa dulce anciana era la única que podía verme tal y como soy, y sea cual sea mi estado de ánimo. Por eso ni me preocupé por disimular que estaba llorando.
-Mi niña, no puedes estar así todo el día todos los días-dijo suavemente, acercándose a mí
-Creo que sí puedo...
-Tarde o temprano deberás superar a ese muchacho, mi vida...
-No quiero superarlo... hasta tú me dijiste que era el mejor postor para mí...
-Bueno... Luego hablamos de eso. Ahora, vine a avisarte que tienes visitas.
-¿Visitas? ¿Quién?
-Un muchacho...
-No es Roger, ¿verdad?
-Mi niña, si no fuera porque tu papá aboga por él ¿Crees que dejaría entrar a ese infeliz?
-Sí... lo siento. ¿Entonces?
-Es un chico de pelo castaño, ojos verdes...
-Mmm... No sé...
-Su apellido es Deacon
-¿Deacon...? Ahh... ya, ya sé. ¿Dónde está?
-En el vestíbulo, ¿quieres que lo traiga o...?
-No, muchas gracias. Yo bajaré
-Muy bien
Salí de mi habitación y bajé las escaleras rápidamente. En efecto, John estaba parado de espaldas a la puerta, viendo todo a su alrededor.
-¿John?-dije, llegando frente a él
-Oh, hola Stefani-saludó él
Nunca me imaginé que John fuera a aparecer en mi puerta. Es decir, yo lo conocía más que nada de vista, por ser amigo de Bri y Fred, pero nada más. Pero ahora ahí estaba, parado frente a mí, con su cabello castaño cayéndole en los ojos y envuelto en una chaqueta verde que le quedaba un poco grande.
-Hola-respondí, algo extrañada
-¿Estabas llorando?-preguntó
-Ah, no, no, esto... bueno, no importa. ¿Qué haces aquí?
-Bueno, yo... ¿Podemos hablar un rato?
-Claro... ven, vamos al jardín
Lo conduje al jardín trasero de la casa, donde en una pequeña terraza había una gran mesa techada. Nos sentamos en la mesa, uno frente a otro.
-Ahora sí-dije, mirándolo
-Sólo vine para que sepas que voy a ayudarte a que regreses con Brian a como dé lugar
Me costó varios segundos entender lo que John había dicho. Sólo lo miré y dije, casi en un susurro:
-¿Qué?
-Eso que oíste-respondió, con una pequeña sonrisa
-Pero... creí que ustedes no querían que yo...
-¿No recuerdas? El día que hablamos contigo, yo opiné que tú debías estar con Brian. Pues mi posición no ha cambiado
Me le quedé viendo como una idiota, sin entender del todo aún. John se apartó el pelo de la frente y explicó:
-Brian está diferente ahora. No peor ni mejor, sólo... diferente. Podríamos decir que bien, pero definitivamente no tan bien como cuando tú eras su novia. Tú eres la que debe estar con él. Freddie no lo nota, de hecho, ni Brian lo acepta del todo.
-Vaya... te lo agradezco John, pero él no quiere volver conmigo...
-Por eso te voy a ayudar. Yo creo que Bri estará mucho mejor contigo
-¿Acaso Hazel no te agrada?
-Claro que sí, me agrada mucho, pero la novia de Bri eres tú, no ella.
-No sé...
-Oh, vamos. Sabemos que quieres volver con él, ¿o no?
-Es lo que más deseo en el mundo
-¿Entonces?
-Es que... Lo amo muchísimo, pero como él a mí ya no, no quiero molestarlo...
-Y por eso debes volver a conquistarlo
-Él no quiere ser conquistado por mí
-Pero lo harás, y yo voy a ayudarte. Claro, si decides hacerlo...
Pensé en la forma en la que Bri me había abrazado, en sus ojos, su sonrisa... y a continuación, surgió esa imagen de Hazel besándolo y mirándome con sorna. Sentí que la sangre me hervía, y dije:
-Quiero volver a enamorar a Bri, a como dé lugar
-¡Esa es la actitud! Dame unos días, y te tendré un plan. Confía en mí
-Gracias...
-No me agradezcas hasta que veamos que funcionó. Voy a pensar que va primero, ¿ok?
-Bien...