Yoü And I

Capítulo 10

~Narrado por Brian~

De las miles de personas que habían ido al taller a solicitar algún trabajo o para lo que fuera, a quien menos esperaba ver era a...

-¿Freddie? ¿Qué haces tú aquí?

-Alegrándote el día, Bri

Sí. Freddie, nuestro Freddie, estaba en la puerta del taller, mirando todo a su alrededor como si se tratara de un universo completamente raro para él.

-¿Qué haces, Bri?-preguntó, acercándose a mí

-Una puerta de un ropero-respondí

-¿Y a qué hora usas el martillo?

-No necesito un martillo para esta puerta, Fred, es una sola pieza

-¡Pero los carpinteros siempre usan martillos!

-No siempre. Bienvenido al mundo real.

Debo admitir que estaba apenado y esperando un comentario ofensivo. Freddie solía criticarme "constructivamente" por todo, más por mi forma de vestir. Así que, en ese momento que solo traía un short que me quedaba muy grande de la cintura y una camiseta sin mangas, y que estaba todo lleno de aserrín, aguardaba sus quejas...

-No mames Bri-dijo-No había notado lo flaco que estás

-¿Ah? Ah sí-dije-Eso dicen

-¿Por qué?

-Yo que sé

-¿Ya comiste hoy?

-Mmm... Tomé leche en la mañana

-¡Ahora resulta que eres anoréxico!

-No, tranquilo. Solo que no había nada más

-¡Pero...!

-Cállate enano. ¿A qué se debe el honor de tu visita?

Hice énfasis, con algo de sarcasmo, a la palabra "honor". Pero igual a Freddie pareció encantarle.

-Vengo a decirte que dejes de ser idiota-informó Fred, sentándose en mi mesa de trabajo... Sobre un montón de tornillos, por lo que se levantó de inmediato, gritando.

-Creo que el idiota es otro-señalé, riendo

-Por lo menos yo si tengo pelo

-Umm... Gracioso

-Como te decía, vengo a ayudarte

-¿Ayudarme con qué?

-Llevas días peleado con Stefani

Me volví para otro lado.

-Decidí que tú mereces ayuda, así que me pondré de tu lado-señaló, acariciándome la cabeza como a un perro

-Vaya, gracias-respondí, quitándome de ahí. Detestaba que hicieran eso ahora que tenía el pelo corto. A menos que fuera Stefani quien lo hiciera.

-Sí, escucha... Quiero darte consejos, si es que quieres escucharlos. O seguro tienes ya un brillante plan para volver a hablarle...

Tenía que aceptar que necesitaba a Fred. Nadie conocía a Stefani como él, y yo ya estaba desesperado.

-Acepto tus consejos-dije, dejando todas mis herramientas de lado

-Primero debes decir que soy fabuloso-exigió Freddie, orgulloso

-Eses fabuloso

-También di que soy perfecto

-Eres perfecto