~Narrado por Brian~
Cuando desperté a la mañana siguiente, me sentía muy adolorido. Era algo así como cuando haces mucho ejercicio... En el momento no sientes nada, el dolor viene después. Así estaba yo ahora, sobre todo, me dolía horrible la zona de mis costillas rotas.
Me sentía algo ansioso, más que nada por saber que hoy voy a ver a Stef. No importa si me acepta o si me manda a la mierda, mi nerviosismo es por el simple hecho de pensar en tenerla frente a mí, a ella y a mis tejoncitos. Ya había pasado un mes, seguro se veían muy diferentes ahora. Espero que se acostumbren a mí, y no les tome tiempo dejar de percibirme como a un extraño.
Tocaron a mi puerta despacio, tanto, que creí que me había imaginado el sonido.
-Adelante-respondí, con voz ronca
La puerta se entreabrió, y Madison se asomó por la rendija de la puerta.
-Buenos días-dijo, con una pequeña sonrisa-¿Puedo...?
-Claro, adelante-respondí, incorporándome
Ella entró, vistiendo su pijama. No sé qué habían pensado que iba a pasar, pero tanto Mad como los chicos habían llevado lo necesario para pasar la noche fuera de casa. Dadas las circunstancias, ella se había quedado en la habitación de Roger, mientras él, Freddie y John durmieron en los sillones de la sala.
-¿Los chicos despertaron ya?-pregunté, frotándome con cuidado el ojo izquierdo
-Claro que no, están muertos
-¿Qué hora es?
-Más o menos las 9:00
-Ah... Es muy temprano para ellos
-¿No te pusiste nada para dormir?
-Sólo el bóxer
-Pero hizo mucho frío en la madrugada
-Sí, pero la camiseta me habría lastimado aquí
Me llevé la mano a las quemaduras de cigarrillo. Madison se sentó en la cama junto a mí, y me puso la mano en la frente.
-Ya no estás tan caliente como ayer-comentó-¿Cómo te sientes?
-Mejor, creo
Estornudé. Ella rio. Su cabello rubio no estaba ni un poco revuelto, y sin el maquillaje estaba tan linda como siempre, puede que hasta más.
-Tu cabello-señaló, con una risita
Me llevé una mano a la cabeza, y sentí mis rizos levantados en todas direcciones. Desventajas de ser yo con el cabello ni tan corto ni tan largo. Solté un gruñido, mientras trataba de aplastar mis rizos.
-No te quejes tanto-rio Mad, alborotando aún más mi cabello-Ya quisieran muchos esos rizos perfectos.
-Qué los tomen cuando quieran-bromeé-¿Dormiste bien?
-Sí, muy bien. ¿Y tú?
-Hace un tiempo que no dormía del todo, así que sí
-¿No te lastimaste nada?
-Me duelen las costillas
-Eso es porque no quieres reposar
-Es una pérdida de tiempo, estoy bien
Madison soltó una risita y se acomodó su largo cabello rubio tras las orejas.
-¿Puedo preguntarte algo?-inquirí
-Claro
-Tú no estás de acuerdo con que quiera volver con Stef, ¿verdad?
-No estoy de acuerdo en cómo te ha tratado hasta ahora, pero quiero creer que va a cambiar después de esto. Y no la puedo culpar del todo, sé que sus últimas peleas fueron mi culpa

ESTÁS LEYENDO
Yoü And I
RomantikBrian May es un chico humilde y tímido, con grandes aspiraciones para su futuro. Stefani Germanotta es una rebelde nata cuyo sueño es ser cantante. Cuando ambos se conocen, saben que están dispuestos a estar juntos para siempre, pero ¿y si parece qu...