Mundo Cerrado, Heridas Abiertas

CAPITULO 23

El profesor hablaba. No sabía de que. Yo estaba sentado hasta la última silla de la última fila. Mordía delicadamente la goma de mi lápiz mientras miraba al pizarrón. No es muy cómodo ser el mayor de la clase pero si perdí un año por andar de depresivo debo aguantarme. Rodee los ojos al pensar esto y lleve mi vista a la ventana. Había una chiquilla dos años menor que yo que me coquetea cada clase. Es estresante.

-Hola-se sentó enfrente de mí-.

-¿Hola?

-Creo que no lo notaste porque no pusiste atención pero... hay un trabajo en equipo y pensé que tú y yo podríamos...

-No, Candy, lo siento.

-¿Por qué no? Anda ya dime porque no me haces caso. No soy fea.

-Claro que no lo eres. Pero simplemente no me interesa hacer dicho trabajo. Si estás conmigo terminaras haciéndolo todo tú.

-¿Y?

-Que si para hacerlo solo tú mejor hazlo sola.

Me miro mal, se levanto y fue a su lugar con sus amigas. Será un largo día aguantando esa mirada de te quiero en mi cama, sobre mí y sin condón. Reí ante ese raro pensamiento. Ya que hace mu... bueno no mucho porque en Acapulco estuve con Zoe pero... ñeh, se entiende.

-Hey.

Gire mi visa a la ventana y hacia abajo. Era Jos.

-¿Qué haces?

-Hola.

-Estoy en clase, José.

-Ni siquiera estas poniendo atención-metió la mano y me pego-.

-Lárgate Canela-dije lo más bajo posible-.

-Adivina quien está afuera-tomo mi lápiz y escribió el nombre de Ximena en mi cuaderno-.

-No me interesa, Jos, deja eso-le quite el lápiz-.

-Alan estaba afuera.

-¿Qué?

-Se llevo a Zoe y hace un momento volvió... solo.

-¿Cómo sabes? ¿Qué no tienes clases?

-Me sacaron por molestar a Freddy. Oye ¿Quién es ella?-saco una bolsa de papitas mientras veía a Candy-

-Es Candy-me recosté más en la silla-.

-¿Hay algún problema con ella?

-Bueno creí que sus miradas dejaban claro el problema.

-se asomo casi metiéndose por la ventana para ver-. Nop.

-¿Te importaría dejarme en paz?

-Estoy aburrido, Alonso, eres mi amigo debes estar conmigo.

-¿Y que quieres que haga?

-No lo sé, acompáñame-miro el pizarrón-... ¿entiendes eso?

-Ni una mierda.

-¿Entonces? ¿Qué haces aquí? vamos a comer, muero de hambre.

-Huy que novedad.

-¿Qué me quisiste decir?

-Nada, Jos, nada-dije sonriendo-.

-¡¡Candy, Alonso te ama!!

-¡¡Canela, lárgate al carajo!!

Trate de golpearlo por la ventana pero se alejo. Así que entre de nuevo y al girarme vi al profesor frente a mí.

-A ver Villalpando... ¿De qué estamos hablando?

-Emm... de... eh...

-suspiro-. Fuera de mi clase.

-P-pero...

-¡Nada, fuera!

Tome mis cosas y salí del salón. Llegue a mí casillero y guarde mis cosas.

-¡Hey!-dijo Jos tomándome por la cintura y cargándome-.

-¡Déjame, Canela, suéltame!

-Okey, Okey-me bajo-. Vamos a la cafetería.

-Jos, ¿todo es un juego para ti?

-A veces.

Rodee los ojos y termine de guardar mis cosas. Accedí a ir con él solo porque estaba solo. Ximena me ha ignorado todo el puto día. Llegamos a la cafetería y la vi con Bryan. Él se veía triste aunque intentaba sonreír. Quise ir a hablar con él pero Jos me detuvo.

-No es un buen momento.

-¿Por?

-Ayer término con Zoe... seguramente está muy molesto contigo.

-¿Conmigo?

-¿Aun no entiendes? Él en verdad cree que tú le hiciste daño. Y las fotos...

-¡Yo no la lastimaría!

-Te creo, Bro, pero... tú volviste a la ciudad por problemas, si lo niegas te molestaran más por eso... porque tuviste problemas en España y vienes aquí y empiezan.

-Eso no es justo.

-Yo sé que no... Trata de ignorar todas las idioteces que dicen.

Solo asentí. En realidad ignorar no me salía muy bien últimamente.

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