CAPITULO 57

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MARATON 4/?

Me mire al espejo mientras lavaba mis manos. Vamos Villalpando, solo venias a ver si estaba viva y lo está. Ahora vete.

-¿Alonso? ¿Todo bien?

-Sí, ya salgo.

Seque mis manos y salí, la vi sentada tomando un vaso de agua y había otro para mí.

-Lo siento Zoe, tengo que irme.

-A-ay, no, espera. Tiene mucho que no hablamos quédate... una media hora más.

-Es que...

-Anda, un ratito-dijo juntando su dedo índice y el pulgar-. ¿Sí?

Suspire y acepte quedarme. Me senté y bebí el agua. Platicamos un rato y luego de unos minutos me dispuse a irme.

-Bueno, Zoe... me alegra que estés bien.

-Tú no te preocupes... estoy mejor que nunca. Más ahora que veo que te preocupo.

-De hecho vine por petición de Ximena.

-¿Qué?

-Estaba preocupada. A pesar de todo no te odia.

-Vaya... no me lo esperaba.

-Bueno-agarre ambos vasos y los lleve a la cocina-... fue bueno...

Mire un frasco al lado de la jarra de agua. Lo tome y leí la etiqueta.

-¿Zoe?

-Dime...

-¿Qué es...?

En eso sentí que todo me daba vueltas. Los ojos me pesaban y me sentía mareado.

-Zoe...

-¿Estás bien?

-¿Qué...? no me toques... ¿Qué mierda le pusiste al agua?

-Solo un par de somníferos-acaricio mi cabello-.

-Tengo que irme...

-No puedes... ven aquí.

-No... Déjame...

-Shh-me tomo de la mano y me llevo al sofá-... todo va a estar bien, serás mío de nuevo.

Me recosté en el sofá y poco a poco fui perdiendo la conciencia.

***

-¿Alonso?-lo moví-. Perfecto.

El timbre sonó y corrí a abrir.

-Le llame a Bryan para agradecerle y que ya no necesitamos su ayuda.

-¿Trajiste la cámara?

-Por supuesto.

Saco una pequeña bolsa y saco una cámara de video.

-Bien, ayúdame a llevarlo a mí habitación.

Lo cargo fácilmente y lo llevo a mí cuarto, lo recostó en la cama. Mientras lo hacía me empecé a quitar el vestido.

-¿Qué haces?-susurro-.

-Tú cállate, tú solo toma las fotos.

-Okey.

Se paro en la puerta y yo deje el vestido en el suelo quedando en ropa interior. Empecé desabotonando su camisa, bese su pecho y sus labios. Me quite el sostén y me coloque sobre él. Obviamente si estaba dormido no podría hacer lo que pienso pero al menos servirá para que de una vez por todas, esa idiota se aleje. 

-Ximena-escuche de sus labios-... Ximena... te amo, Xime...

-Maldita sea.

-Cállate y sigue.

Luego de varias fotos besándolo, me metí bajo las cobijas y lo cubrí. Puse su mano alrededor de mí haciendo que me abrazara y Alan nos tomo fotos así. La gran sorpresa que se llevara Ximena.


Mundo Cerrado, Heridas AbiertasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora