— Ciento cincuenta –Digo y paso saliva por mi garganta.
¡¿Donde está Murdoc?! Apenas le toma máximo dos minutos llegar aquí.
¿Y si se echó a perder el ascensor?.
Cuenta lento 2-D.
Si me quiere aprisionar a su lado se supone que no dejara que muera ¿No? ¿O es qué eso quiere?.
¿¡Me quiere dejar aquí encerrado hasta que ya no respire!?.
No, eso no, él no... Mierda.
Murdoc quiere deshacerse de mí, por eso no ha traído comida ¡Ni siquiera agua! ... O quizás eso sea por lo que hice en el estudio... no, tiene más sentido el que Murdoc quiera deshacerse de mí, ya se aburrió de soportarme. Oh mierda él mismo lo dijo ayer.
«— Ya me aburrí de ti y de tener que verte –habló exasperado– ¡Cyborg! Llevatelo a su habitación. »
— Ciento diecinueve.
Quito la tapa del frasco, ni loco me tomare todo esto, pero por lo menos puedo hacer como que lo haré... Ay, lo único que hago es humillarme, no vendrá.
Soy un cobarde jamás podría o se me pasaría por la cabeza, en serio, el suicidarme, cuando llegue la cuenta a cero Murdoc encontrará otra cosa más con la cual molestarme.
Debí haber imaginado que planeaba hacer algo parecido, él mismo dijo que se aburrió de mí y de tener que soportarme.
Ladeo el frasco y los comprimidos caen en mi mano, sostengo los más que puedo y trato de sonreír.
— Cien.
Mierda.
Relamo mis labios y sigo con la cuenta regresiva.
¿Por qué sigo contando? Esta claro que no lo haré.
Un sonido profundo me saca de mis pensamientos y recuerdo porque es que estoy haciendo esto.
Tengo que salir de aquí. Esa maldita ballena no se calla y no quiero seguir escuchandola.
Creo que por fin te estoy odiando Murdoc.
— Me hubiera gustado hacer esto, Ochenta y ocho, al frente tuyo, no a través de un cámara, Ochenta y siete, para que veas el final de lo... Que provocaste –dije tratando de exagerar lo más posible– Ochenta y seis, para que veas como muere lo único que no destrozaste .
No, me pasé, esto ya es muy dramático...
— Ochenta y cinco, to-todo esto es tu culpa –concluí.
Juego con las píldoras de mi mano y relamo mis labios, un minuto y más es lo que queda y ni rastro de él.
¿Y si no está viendo las cámaras?.
La Ballena vuelve a hacer su ruido desesperante y me esfuerzo por no tiritar de vuelta.
¿Qué no puede bajar ya?.
— Supongo que no bajaras... Cincuenta, adiós Murdoc –digo viendo a la cámara. como si estuviera apenado ... Aunque quizas en realidad lo esté ¿Lo estoy? Quizás sí, quizás en el fondo estaba esperando de que atravesara esa puerta y las cosas se arreglaran, o que por lo menos demostrara que su preocupación por mí no fue falsa del todo.
Debería dejar de soñar y pensar en tonterías ¿En serio estoy pensando arreglar las cosas con un manipulador escrepuloso?.
— Cuarenta y uno.
No llegará.
¿Qué pensará él? ¿Qué no lo haré? quizás esté ahora contando los segundos con entusiasmo a que termine la cuenta. Si esto fuera verdad moriría así, sin más, no puedo creer lo demasiado fácil que sería por fin escapar de él.
ESTÁS LEYENDO
Confidente
Fanfiction«- Podemos invertir los Papeles ... Sólo cuentame todo y Murdoc será nuestra alma frágil » - Ambientado en la tercera fase - 2doc! La autora no se hace responsable de los daños sentimentales provocados por su obra