Pt 1.
_________________________________________
— No lo sé Murdoc –digo aún pisando las tablas del muelle.
Le dije que lo acompañaría, pero ya no sé si estoy dispuesto a hacerlo.
No quiero volver a ver a esa cosa, si fuera por mí no sacaría ni siquiera un pie de esta isla.
— Estás con Murdoc Niccals –levanta la cabeza orgulloso como si se creyera alguna especie de caballero medieval.
Sep... y lo que me espera allá afuera es un demonio, que como el mismo Murdoc dijo es más peligroso que los comunes ... Si es que existe algún demonio común.
— Exacto –retrocedí dos pasos y su sonrisa desaparece.
— Me ofendes –alza su mano y espera a que la tome mientras suspira– ya entra aquí maldito imbécil –habla refiriéndose al yate.
— ¿Y-y por qué no nos acompaña Cyborg, maldito desquiciado? –pregunté aun con nerviosismo, a pesar de intentar seguirle el juego, mis manos sudan, de verdad no quiero salir de esta isla hasta que esté totalmente seguro de que no me lo encontraré.
— La tengo entretenida con otra cosa.
—¿Q-qué cosa? –cuestioné para intentar sacarle conversación y alargar esto lo más que pueda.
— Te lo diré cuando subas al yate –me mira sin expresión alguna.
Maldito.
— Oh espera, qui-iero ir al ba-.
— ¡2-D! –vocifera ya harto– o entras– dice con la misma expresión seria– o entras.
— E-eh yo-bien, si ya-ya entro –respondo con la cabeza gacha y un poco acelerado.
No es que tenga miedo, lo que pasa es que no quiero que se enoje. Hoy me ignoró prácticamente toda la mañana cuando le dije que no quería acompañarle, a pesar de ya haberle dicho que lo haría. Tuve que seder y me volvió a hablar. Preferiría hasta que me mirara feo, pero no, él me ignora y ni siquiera me mira. No le entiendo, se supone que le gusto y aunque se enoje conmigo debería prestarme atención, estúpido Murdoc.
— ¿Qué esperas?.
— Ya-ya voy.
— Ven aquí –toma mi mano para que pueda apoyarme en él al subir al yate. Pero en vez de funcionar como un tipo de apoyo, de un tiron me atrae a él y antes de que tropiece o caiga al agua sus manos van a mi cintura y me eleva dando una media vuelta para dejarme dentro de la embarcación y oficialmente llevarme fuera de Plastic Beach.
— Eh...
Las palabras se traban en mi boca y lo único que hago es ver sus ojos bicolor.
No vi eso venir.
— ¿Si es que era necesario? –pregunta sacándome las palabras de la boca y despertandome del pequeño trance– sí, lo era –me baja con cuidado.
Una sonrisa se me escapa, sin embargo, al instante mi orgullo no quiere demostrarlo. Un poco de atención no es malo.
— Y-ya hagamos rápido lo que querías hacer y regresemos luego.
— Agh 2-D –se queja mientras desata la cuerda que une el pequeño yate que reparó Cyborg.
El tacto de sus manos impregnada en mi cintura desaparece de apoco y la seguridad de hace unos segundos se le suma, es ahí cuando me doy cuenta de que estoy desprotegido y que tan solo una sombra podría bajarme de esta ensoñación.

ESTÁS LEYENDO
Confidente
Fanfiction«- Podemos invertir los Papeles ... Sólo cuentame todo y Murdoc será nuestra alma frágil » - Ambientado en la tercera fase - 2doc! La autora no se hace responsable de los daños sentimentales provocados por su obra