Sólo dos días más para que llegase Navidad. Todos estábamos emocionados.
Las celebraciones en mi casa eran tranquilas y muy cariñosas. Gianne y yo íbamos a casa de mi madre y cocinábamos, si ella no lo había cocinado, el cordero y las ensaladas junto a ella. Cenábamos, reíamos, alguna vez habíamos visto películas; mi hermana me tomaba el pelo y hablábamos con nostalgia de antiguas Navidades con mi difunto padre.
Alguna vez había venido con un amigo, pero un amigo muy unido; como por ejemplo: Martin. O mi hermana traía a Mackenzie, su mejor amiga. Poco más; podía darse la situación en la que mi madre invitaba a Andrew; él fue un gran amigo de mi padre y le tenía gran aprecio tanto a mi madre como a mi hermana y a mí.
Nos solíamos quedar a dormir en casa de mi madre ya que la nieve no dejaba volver a nuestras casas con mucha seguridad; las que por cierto estaban como mucho a dos o tres manzanas de la casa de mi madre. Pero a mí madre le agradaba bastante la idea de tenernos cerca, como cuando éramos pequeños y nos sentábamos a cantar villancicos; y cuando bajábamos con gran ilusión a abrir los regalos bajo el árbol de Navidad.
Teníamos muchas fotos navideñas divertidas. De vez en cuando le entraba nostalgia y revisaba álbumes de fotos dejando caer alguna que otra lágrima de orgullo.
Era diferente tener pasar de tener a dos hijos cariñosos e infantiles a tener a jóvenes adultos que abandonaban el nido.
Así eran mis navidades; siempre eran así, pero entonces te conocí...Las cosas podrían cambiar...
N/A: ¡Ay santa madre! YA ESTAMOS EN EL #138 DE HISTORIA CORTA; HEMOS PASADO DE UN DÍA A OTRO. ¡GRACIAS!❤️ OS ADORO. Vale, ya me calmo, jajaja, en serio gracias.
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Una Coca Cola para enamorar
Nouvelles"Te conocí por casualidad, estabas tomando una Coca Cola" Él era el barman de un establecimiento más bien humilde, un sitio corriente en el que se servían bebidas de todo tipo. Ella era su cliente habitual...Y siempre pedía lo mismo: una Coca Cola...