d*o*c*e

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--¿Voy a tener una hermanito?... mami... voy a tener un hermanito? - Val no dejaba de preguntar lo mismo y lo mismo en todo el trayecto a la clínica.

--Aún no lo sabemos, mi amor -responde Mario.

Ese día en particular, más de 10 hombres fuertemente armados cuidaban de la familia Murillo pero aún así Mario y Valentina no lograban tener tranquilidad aunque trataban de aparentarla ante sus hijos, sobre todo ante la pequeña, pues Danny, aunque era joven, tenía una mente madura y tomaría las cosas con calma cuando le explicaran.  Ese mismo día Mario hablaría con él.

A esa misma hora, en el apartamento de Lulú

--Te ves muy contento, Goliat.

--Lo estoy -responde éste mientras devoraba un bistec que ella le preparó.

--Pues vaya que ese papel contenía lo que necesitamos... creo que Dios está de nuestro lado.

Lulú toma la invitación y comienza a leer:

GRAN INAUGURACIÓN

HOTEL GREEN PLACE

MADISON  AVENUE 327

SÁBADO 26 DE MAYO DE 2018

8 DE LA NOCHE

MARIO MURILLO ACOSTA

--Bla, bla, bla... ¿crees que el muchacho asistirá? 

--Claro que irá... toda la familia estará ahí.  A ese Erick le traigo unas ganas de darle en la cara con mis puños -dice Salomón entrecerrando los ojos.

--¿Erick? ¿quién te asegura que irá? 

--Ese imbécil estaba anoche con Mario, solo que él ya estaba dentro del coche con una de las bailarinas... ahora no recuerdo el nombre.

--Mmmm... pues de eso no me di cuenta.

--Yo no perdí detalle de nada... 

--Bueno, te dejo un rato... iré a llevar toda esta ropa a la vecina para que la lave.

--No creo que sea bueno que andes interactuando con nadie.  Es peligroso.

--¿Ah sí?  Pues entonces lava tu ropa.

--No se trata de eso, Lulú.

--No me llames así.... soy Dalhila... no lo olvides.

--Me enfermas, Dalhilaaaaaa.... -Salomón arrastra las letras del nombre- tan fácil que es llevar la ropa a la tintorería.

--Pues ya he hablado con ella y creo que es mejor seguir como estamos para que no sospeche nada.  

--Está bien... escuché decir que tiene una hija, verdad?

--Sí.

--¿Es pequeña?

--No lo sé. Nunca la he visto pero sé que va a la universidad.

--¿Cómo se llama esa señora?

--Tampoco lo sé -contesta Lulú abriendo los brazos- no se lo pregunté.

--Es mejor no saber cosas.  La información a veces es peligrosa -puntualiza Salomón.

--Ahora vuelvo... -sale la mujer cargando una bolsa negra de plástico mientras él sigue comiendo y bebiendo cerveza.

La madre de Sally se puso muy contenta al ver que Dalhila le llevaba trabajo y lo bueno era que le pagaba por adelantado y pagaba muy bien.  Parecía que la mujer no tuviera idea de cuánto se pagaba por lavar ropa.

Mario y... ValentinaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora