Sally se miraba en el espejo de los baños de mujeres... se tocaba los labios... aún podía sentir el calor del beso, su primer beso.
Ella era una chica introvertida... le costaba trabajo hacer amistades. Solo se limitaba a estudiar.. a ser siempre la mejor en las clases y siempre lo lograba... era una alumna sobresaliente, pero en cosas del amor era muy ingenua.
No sabía lo que significaba ese cosquilleo en el estómago que sentía ante la presencia de Danny. Pero le gustaba... lo disfrutaba, y... no quería separarse de él aunque también le daba miedo lo desconocido.
"¿Será eso el amor?" -se preguntaba.
Después de un rato salió de ahí y fue al lugar que estaba aseando junto con el chico. Se llevó una gran sorpresa al ver a los custodios limpiando las sillas y el piso. Danny les había pedido ayuda para terminar pronto e ir a buscarla.
--Creo que aquí ya no me necesitan... verdad -dijo sin poder evitar una sonrisa pícara de burla de la buena.
--Sally... qué bueno que estás aquí -se acerca Danny a ella- oye... quiero pedirte una disculpa por lo de hace rato, yo...
--No es cierto, señorita -interrumpió Elías con una escoba en la mano- el joven Daniel no está arrepentido.
--¡Ssshhhhtt!,, cállate, Elías... no hagas caso, Sally... yo sí estoy arrepentido de ...
--Que no... -mire señorita- se acerca el custodio a la chica- el joven la ama y el beso que le dio lo dejó temblando de nervios... pero nervios de los buenos... de esos que se sienten cuando se está enamorado.
Salomé no sabía qué decir... le causaba gracia que ese hombre grandote y fuerte se comportara como si fuera un adolescente. Y cuando dirigió la mirada a Daniel notó que estaba rojo como un tomate.
Una llamada telefónica interrumpió la graciosa escena. Era Valentina que deseaba saber cómo estaba su hijo.
Terminado el trabajo de ese piso, continuaron con otro y luego dio la hora de la comida.
Don Martin les dio la tarde libre porque ya no había mucho por hacer.
--Te invito a comer a mi casa, Sally -dijo Daniel muy animado.
--Mmmmm.... pero.... es que no tengo la ropa adecuada.
--¿La ropa adecuada? Claro que usas la ropa adecuada... así te ves hermosa.
Sally se miró a sí misma y pensó que si a Danny no le importaba su vestimenta, a ella tampoco.
--Está bien... por qué no?... Además es temprano y mi madre no sabe que ya salí del trabajo, así que no tengo que ir hasta casa a avisarle.
--Elías, avisa a mi madre que llevo una invitada, por favor... para que agreguen un lugar más a la mesa.
--En seguida, joven -responde el custodio metiche. (jijjiji)
******
En casa de los Murillo estaban casi listos para la comida pero decidieron esperar a Danny y su amiga.
Mario, Valentina y Val, quien tenía poco de haber llegado del colegio, se preguntaban cómo sería la amiga de Daniel.
--¿Va a venir Avril a comer? -pregunta Val a su madre.
--No, mi amor... no es ella. Tu hermano tiene una nueva amiga y no sé cómo se llama.
--Ahhh.¡¡ -exclama la niña impaciente por comenzar a comer.
En la calle se estaciona el coche que usaban los custodios de Danny. Fue Elías quien condujo.
El otro custodio se bajó primero y abrió la puerta trasera ayudando a Sally a bajarse del coche.
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Mario y... Valentina
RomanceMario es un hombre muy atractivo e inmensamente rico pero sin sentimientos. Para él todo son sus negocios, dinero, dinero y más dinero... Hasta que conoció a la pequeña Valentina y sin saberlo le cambió la vida.