Indispensable Peligro ♧finalizada♧

♤ Capítulo 30: Juegos

Llegamos a la entrada de mi habitación entre risas y choques provocados por la falta de luz que no permitía distinguir los obstáculos.
.-Vamos pirata, no puedes ser tan despistado
.-tú has sido la que se tropezó.
.-Sí, pero tú has dado tres vueltas antes de llegar a la habitación correcta y has chocado con un poste.- Entramos
.-Aquí adentro está mejor que afuera a decir verdad.
.-Sí.- y lo miré por unos segundos.- Ven, déjame atender ese huevo que te ha quedado en la frente.
.-No es nada.
.-Yo sé que no, pero entre el alcohol, y tu estupidez puede ser un peligro.- Traje los primeros auxilios que Chopper deja por todo el barco y él se sentó en la hamaca, me miraba a los ojos mientras yo le curaba la frente.- ¿Cómo has llegado a chocar así?
.-¿Quién de la tripulación te gusta?.- omitió por completo lo que dije.
.-Nadie. ¿Y a ti?
.- No puedes fijarte en alguien tan degenerado como el cocinero estúpido ¿o sí?.- De nuevo ignoró mi pregunta.
.-Vamos Zoro, ¿estás celoso de él?
.-Ni un poco.
.-¿Y a ti quien?- insistí.
.-No estoy para esos juegos de niños.
.-Tú has empezado y ahora dices que son juegos de niños.- Se paró de golpe ante mi respuesta.
.-No me interesa quién ha empezado, solo te pregunté algo niñita.
.-Mira Roronoa.- Ya me sacó de quicio, no tengo paciencia menos para ambigüedades como estas, no puedo creer lo terco que puede llegar a ser a veces.- Si tienes algo que decirme se bien maduro para ser directo, eres capaz de enfrentar todo menos hablar algo tan simple con una "niñita" estoy harta de tu mal humor y ambigüedad.-
Me miró atónito por unos segundos, el alcohol nos cambiaba a ambos, nos desinhibiamos, hablabamos cosas que no nos diríamos nunca, casi nos besamos, pero nada era concreto. Así es como nos llevábamos, un día era perfecto con él, divertido, a veces entrenábamos, si teníamos suerte las misiones las hacíamos juntos, a veces comíamos juntos, a Sanji no le gustaba, lo que hacía que Zoro lo disfrutase más; Sin embargo, al día siguiente podíamos discutir por todo, ignorarnos, no podía si quiera esperar una palabra amable de vuelta, o una mirada cálida, o una de sus sonrisas.
De esas sonrisas que tanto me gustan, porque solo yo las provoco naturalmente y así mismo, solo él puede causarme nervios, de los cuales se da cuenta por mi mala costumbre de apretarme el labio. Disfrutamos de la misma manera lo que provocamos en el otro... Una sonrisa... de esas que me vuelven loca, de esas sonrisas que justo ahora me estaba regalando...
.-Mira, gata...- a veces me llamaba así pero por la Pasqui, dice que somos una sola, y a mí me encanta que piense así.- No se qué rollos te has pasado por tu cabecita de niña infantil y loca, pero yo no tengo nada que decirte, y si tuviera, ya te habrías enterado.- Terminó su frase e iba a replicar, pero no lo hice. Me calló. Con una de sus enormes manos me tomó del rostro, a penas apretándome las mejillas, me levantó del mentón y me besó la frente. Me tenía hipnotizada, Zoro me tenía hipnotizada.- Ahora vete a dormir, las niñas buenas no deberían estar despiertas a esta hora.- y se marchó sin más, me dejó aturdida y se fue, no hizo ruido alguno, del sonido de las risas pasó al silencio en un segundo, las únicas que acallaban el silencio eran las voces de mis pensamientos. ¿Qué había pasado recién? ¿Me iba a besar? ¿Por qué no lo hizo? ¿Es que soy un juego para él? ¿Que debería hacer? ¿Debería esperar hasta que él se decidiera por algo? ¿O debería yo tomar la iniciativa? No. Ha sido un idiota y ha jugado porque el alcohol es el que le ha hecho actuar.

Bitácora 15 de Abril:
Zoro es un idiota, bueno querida, ya lo sabías y también sabes que amo su sonrisa (dibujo de su sonrisa) pero odio que crea que puede hacer y deshacer a su manera, que puede controlarme, manipularme y jugar conmigo como si fuera un títere, pero no importa, las vería negra, no sabe que si el juega a la mala, yo puedo ser el triple de veces peor.

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