♧ Capítulo 9: Recuperación.

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Han pasado los días correspondientes del reposo de Nima, Torao ha estado muy cercano a ella, la va a ver mucho, pero creo que eso se acaba en unos días, se ha quedado en nuestro barco sólo para asegurarse de que ella se encuentre bien, o eso dice al menos, sin embargo a Sanji, Nami, Robin y a mi, no nos engaña. Sabemos cuáles son sus intenciones, pero al único que le parece todo menos "tierno" es a mi.
Tenemos un banquete preparado exclusivamente para celebrar. A penas salga a cubierta, se llevará la sorpresa.
Nami fue a buscarla, ya que luego de tantos días, su cuerpo sigue débil para caminar sola, he querido ir yo, pero a lo mejor me rechazaría y además...
Su presencia interrumpió mis pensamientos, hace días no la veía. La última vez estaba herida, toda morada por los hematomas, rasmillada, con ojeras, pero todo eso físico se le había pasado, seguramente tenía alguna que otra cicatriz o herida que no ha sanado del todo, sin embargo ahí estaba, de pie junto a Nami. Luciendo naturalmente linda, ella no se daba cuenta, su mirada era baja, había perdido mucha seguridad, había perdido peso y se le notaba, pero estaba radiante, para mi al menos.
Todos se acercaron a abrazarla menos Torao, Robin y yo.
.- ¡Me asfixian!.- dijo entre medio de los brutos, Nami la ayudó para liberarse del resto y luego de agradecerle con un gesto de cabeza, dijo.- Creo que puedo seguir sola Nami, gracias.
.-Bueno, pero no dudes en pedir ayuda.- dijo esta.
Luego se acercó a Robin porque estaba más próxima. Se dieron un abrazo y compartieron unas palabras, era mi turno. Y antes de que ella pudiera dar un paso, me acerqué a ella lo más rápido, y aunque me arriesgaba a que me rechazara, la abracé. Se quedó helada, tieza, definitivamente no lo esperaba, pero yo lo necesitaba. Todos estaban expectantes, tensos, no sabían lo que pasaría y yo tampoco, pero aún así le dije al oído.
.- Me alegra verte así... te ves linda, fuerte.- me esperaba algún gracias de su parte, o tal vez que me ignorara por completo, pero su respuesta me sorprendió. En un susurro sólo audible por mi, dijo.
.-Tienes una definición muy extraña de linda, pirata.
Y aunque no quería, la solté para mirarla a los ojos, tenía esa mirada media de niña inocente y media de pícara que sólo yo podía ver. Me enamoraba cada cosa que decía, cómo me respondía irónica, inteligente, sutil. Se veía linda, y quería de verdad que lo supiera, le iba a insistir, para que me creyera, pero se me apresuraron cuando vieron que no decía nada.
.-Te ves bien, Nima-ya.- acto seguido un abrazo del doctor, más idiota que el mismo cocinero pervertido.
.-Es gracias a ti Law-kun
Y aunque a él lo trataba de Law-kun y a mi solo de pirata, y a él le diera las gracias y de mi se burlara por lo que dije, me sentí bien, orgulloso. Miré a Torao feliz, porque sus palabras para mi son mucho más significativas y personales que las que les dedicó a él, es como un idioma clave que ella sólo mantiene conmigo, y podría asegurar que es su verdadera forma de ser.
.-Sanji-kun, gracias a ti también por preparar la mejor comida, fue fundamental.- y esas palabras confirmaban lo que creía, me daban razones para creer que ella me quería.
.-No sonrías tanto, Zoro-ya.- me dijo Torao a mis espaldas sólo para que yo escuchace.- Ella me quiere y mientras tú te desapareciste estos días hemos avanzado, de hecho te ha llorado y he sido su consuelo. No vengo a amenazarte sólo vengo a informarte de la situación en la que estás para que no te hagas ilusiones absurdas.
Me di vuelta y me acerqué a él para mirarlo directamente, le sacaba unos centímetros. ¿Quién se cree para hablarme así? Maldito idiota.
.-Si estuvieras tan seguro de lo que dices no sería necesario contarmelo a mi ¿o sí? Además ¿me ha llorado? ¿no te das cuentas que en el fondo es porque le importo? Y ni si quiera me alegro de que sea así  pero tú... ¿tú necesitas aprovecharte de su mal estar para acercarte? Qué imbécil que eres. Mira Trafalgar. No voy a tener problemas contigo porque ella está feliz, y te agradezco lo mucho que la has cuidado, pero no te confundas. Ella me quiere, y yo la amo, y no voy a dejar que alguien llegue, y en unos días me arrebate lo mucho que he logrado en meses, la he protegido, la he escuchado y la he besado, y es algo por lo que estoy dispuesto a dar mi vida ¿entiendes?.-
Mis palabras lo han molestado, pero es reservado, si hubiese sido yo en su lugar, ya me hubiese pegado, pero estábamos cerca, mirandonos desafiantes, con puños y mandíbulas apretadas.
.-No eres al único que ha besado en este barco entonces.
¿Qué? ¿Es verdad? No puede ser... No creo que ella... ¿Es posible?
Nuestra discusión no ha pasado desapercibida. El resto no ha escuchado nada, pero algunos han dado cuenta porque una de las voces del lugar, dijo un tanto enfadada:
.-Ustedes no dejan de pelear ni si quiera en este tipo de situaciones, ¿verdad?

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Indispensable Peligro ♧finalizada♧Donde viven las historias. Descúbrelo ahora