Indispensable Peligro ♧finalizada♧

♧ Capítulo 18: Dominó.

Habíamos descendido a la isla, era particular, es una isla dentro de otra, ya que hay un árbol enorme al medio del lugar y es en el interior donde hay vida. Casas, mercadillos y servicios como en cualquier otro pueblo. Es habitado por una especie extraña de aves-humanos y las casas están hechas sobre las ramas del árbol. Están construidas a partir de las mismas hojas, supongo que es su naturaleza de mitad pájaros que les permite construir ese tipo de "casas".
A cualquier lado que ves puedes ver "nubes" de hojas, el cielo solo se alcanzaba a ver en algunos espacios, caminas por las mismas ramas y uniones que se hicieron para poder construir la ciudad sobre el árbol. Íbamos en busca de una extraña flor azul que necesitaba Usopp y bueno, de aventuras como dice Luffy. Obviamente me dejaron junto a Zoro, gracias a Nami debo decir, que le he rogado. Ha conseguido que nos quedaramos al menos dos días en el lugar para recargar fuerzas tranquilamente y para encontrar la extraña flor que no se daba en cualquier lugar. Me ha preguntado porque insistí con lo de ir junto a Zoro, solo le dije que él y yo debemos hablar. El debe contarme algunas cosas sobre esa fantasma extraña y yo debo decirle otras tantas cosas.

.-Ya, dime.
.-¿El qué?
.-Has actuado rara todo el día desde ayer.
Nuestra misión en este momento era buscar un lugar donde hospedar. Ninguno se había quedado en el barco, el cual estaba demasiado lejos y escondido para ir y pasar la noche allí.
Luego de resevar el lugar en el que hospedaríamos hemos salido hacia el punto de reunión con el resto. Teníamos bastante tiempo antes de llegar allí.
.-¿Es por Perona?.-No, pensé, ojalá fuera por eso.- La conozco de hace unos años, nos enfrentamos a ella y luego me la encontré el tiempo que pasé entrenando con Mihawk.- me empezó a contar mientras caminábamos y aunque yo no le había pedido ninguna explicación, siguió.- No fue nada. Ella simplemente iba a mi habitación, me rondeaba, a veces se sobrepasaba y me besaba, claro, yo me dejaba pero no quería nada. Al final solo me dejaba. Era muy amable de hecho, nos cocinaba a ambos y así, la apreciaba un poco creo. Supongo que la carne es débil a veces y si ella insistía como lo hacía, yo no me negaba. Pero eso hasta que te conocí.- Eso lo hace mucho más difícil de hablar Zoro, gracias.- no lo haría ahora. Mírame...- no podía.- Nima mírame. - eso hice.- Ahora eres tú, no hay más, los dos.- finalizó
...
No le contesté de inmediato. O eso creo,  querida bitacora, de aquí en adelante es un poco confuso, la pena me dejó en shock y hay algunos vacíos en la historia, en fin, sigo: Me quedé mirándolo por un largo tiempo, a lo mejor el tiempo sí se detuvo, porque me permitió recordar cada facción de Zoro antes de que el desastre se desatara, ¿Has visto alguna vez una fila de dominós caerse completamente a causa de una sola pieza? Yo era esa pieza. Tengo el poder de desatar el caos solo con una frase, la frase-pieza. Y sin querer dañar a nadie, se desencadenó una línea de problemas que terminaron de relacionarse de alguna forma.
.-Law me ha besado.- Solté. Mientras veía cada facción de su rostro alegre desfigurarse, me di cuenta que recién ahí tomé el peso de mis actos, no fue cuando a penas Law me había besado, ahí lo estaba disfrutando todavía, pero Zoro ahora lo sabía y es peor de lo que pensé.

Silencio....
Miradas...
Den Den Mushi...
Zoro contesta.

.-Zoro! Soy Nami. Estamos en el barco con Luffy y el resto, la Pascal es la única que se ha quedado en la isla con ustedes. Usopp nos ha rogado que se queden buscando la flor. Sobretodo ahora, es de mucha importancia que lo hagan. Vamos en camino a la siguiente isla, Kaido... Shanks... Luffy... Kidd...
.-Nami! Qué pasó.
.-Kaido fue derrotado por Shanks. Pero Kidd y su alianza aprovecharon la debilidad de Shanks como oportunidad para atacarlo. Una guerra se desató y Luffy no ha dudado en ir. Nos vemos allá cuando traigan la flor.-
Cortó.

Silencio.
Miradas.
Silencio...

.-¿Podemos resolver una cosa a la vez?.- Pregunté
.-Claro. Yo buscaré la dichosa flor y tu busca a la gata. Ya nos encontraremos. - Antes de que pudiera decirle algo más, se fue. Indiferente. Pero siempre como Zoro, y a pesar de que la tristeza seguramente lo estaba consumiendo, su imponencia no sucumbía.
.-Y terminé por perderte por más que lo evité.- susurré.

Caminé por todo el lugar sin rumbo, esperando que la Pasqui me encontrara a mi porque ahora yo no la estaba buscando, solo podía pensar egoístamente en mi y en Zoro. En lo mucho que la cagué. Ojala y mejor me encontraran los dos al mismo tiempo. Zoro.
Había encontrado una especie de salida en uno de los bosques internos del árbol. Era tan enorme la isla dentro de la isla que llegué a orillas de una cascada. La cual para mi sorpresa tenía unas flores con centro rojo como la que había descrito Usopp.
.-Terminé por encontrarte sin querer hacerlo.- le decía a la flor y en vez de sacarla, me quedé admirando su belleza, sin tocarla porque no quería ser yo la que la destrozara, todo lo que tocaba se arruinaba y no quería provocar aquello una vez más.
Me quedé ahí, bajo la sombra de un árbol, con el calor de la tarde y refrescada por la brisa de viento, solo hacía falta algo, y era compañía. La de la Pasqui o Zoro. Eran los que quería ahora, pero una de ellos no se dónde estará y el otro, aunque supiera, igual no me quiere con él.
Así me quedé con lágrimas entre los ojos, sola y sabiendo que ha sido mi culpa.
Desperté con el viento intenso y helado que se levantó y con un sol bajo, poniéndose.
No sabía bien cómo volver, alguna noción tenía, pero la oscuridad se apoderaba del lugar indicando que llegaba la noche y con ella, que debía volver como fuese, con las flores en mis manos.