Capítulo 10

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Nueva York, Diciembre del 2023.

El receso de vacaciones de Navidad y Año Nuevo había llegado. Harley llamó a su madre y hermana para decirles que no iría a casa por la cantidad de trabajos que tenía pendientes en la universidad.

Lo cierto es que no había ninguna tarea pendiente, sólo había viajado desde Cambridge hasta Nueva York para cumplir su palabra, celebrar su cumpleaños y el de Peter juntos.

Para su mala suerte, Harley había nacido un 25 de diciembre, odia el día de su cumpleaños. Su madre siempre trabajaba todo el día y la gente solía darle un solo regalo por navidad y su cumpleaños.

La primera vez que recibió dos regalos o incluso más fue aquella época navideña en la que conoció a Tony, su amigo mecánico lo había llenado de obsequios sin siquiera saber que era su cumpleaños también.

Recordaba la primera navidad que pasó con los Stark. María estaba algo celosa por la cantidad de regalos que recibió y es que fue la segunda vez en su vida que recibió doble regalo en esa festividad.

Salió del aeropuerto para encontrarse con Harold Hogan, uno de los más confiables amigos de Tony. Saludó a Happy y depósito su equipaje en el maletero del vehículo que lo llevaría hasta la residencia Stark.

Al llegar a la que llamó su casa por cinco largos años, fue recibido por María, Henry, Tony y la señora Stark. El pequeño Howard no lo saludó simplemente lo miraba con algo de recelo.

Harley no le tomó importancia a la actitud de Howard, pues cuando llegó por primera vez y se encontró con un pequeño Henry de dos años pasó lo mismo, al niño le tomó tiempo acostumbrarse a su presencia.

Pasó la tarde conversación con María sobre diferentes temas, ya sea la escuela, la universidad, el decathlon, su cumpleaños, navidad, año nuevo, incluso sus amigos: Jacob Campbell, Peter Parker y Cassandra Lang.

— Has hablado con Cassie? — Preguntó María.

— Sí, un poco. Está atareada con la escuela — Comentó.

— Si, a mi también me lo dijo — Mencionó — La escuela también tiene su lado horrible — Suspiró.

— Acaso Midtown es muy díficil para María Stark? — Preguntó para molestarla.

— Ya quisieras — Contestó riendo — Papá y yo hemos estado diseñando trajes pero la escuela me quita demasiado tiempo, debo estudiar y todo eso — Explicó.

— Ya veo... Puedo ver esos trajes? — Preguntó esta vez.

— Vamos! — Exclamó emocionada tomándolo de la mano.

María lo condujo hasta el taller subterráneo, siempre le llamó la atención este lugar pero nunca se atrevió a utilizarlo por miedo a que Tony se molestara con él, pues suficiente era con dejarlo vivir allí.

— Me gustaría crear mi propio traje — Comentó con ilusión.

— Hazlo, puedes hacerlo en estas dos semanas de vacaciones — Animó su amiga.

— Segura? — Preguntó.

— Sí, si quieres mañana comienzas. Ya casi es hora de cenar — Sonrió.

Durante la cena le comentó a Tony su idea de crear su propia armadura en el taller, necesitaba obtener su aprobación no quería abusar de la confianza de su amigo mecánico.

— No hay ningún problema, puedes basarte en mis diseños — Ofreció el mayor.

— Cool! Gracias Tony — Sonrió.

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